Además de erre que erre con Camps, hoy El País nos empapa de chivatazo. Nada menos que una doble página. Tras meses de esconderlo en columnitas o tratarlo de "presunto chivatazo", hoy afirma contundente: "El chivatazo existió" pero... "el autor sigue siendo una incógnita". Meses insistiendo en que al final se detuvo al aparato de extorsión y hoy cambia de opinión. "El chivatazo tuvo éxito: la operación se frustró". Incluso airea "la prueba del chivatazo" en un gran titular. "Elosua: "¡La txakurrada'! ¡Avisarme de la forma que me ha avisado". Claro, que en su opinión el asunto es un "relato surrealista" y "Rubalcaba siempre ha negado que su ministerio ordenara el chivatazo". ¡Que Rubalcaba no ha sido, leñe!
El Mundo también habla de Rubalcaba para advertir a Zapatero. "El vicepresidente afea irónicamente al líder socialista que no fuera ayer a Mérida" a acompañar a Fernández Vara, el declarado fan de Rubalcaba. Según El Mundo, el vicepresidente hablaba "en tono jocoso, pero tampoco habría que desdeñar una segunda lectura más intencionada". El presidente extremeño presentó a Rubalcaba "como si hubiera tomado ya el relevo de Zapatero en el liderazgo socialista". Le trataron "empleando el plural mayestático pero sin pronunciar ese apellido que parece haberse ido al limbo".
Tampoco Raúl del Pozo entiende nada. "El espaldarazo a Cascos se lo dio Zapatero en Oviedo cuando lo atacó (...) No entiendo cómo Rajoy ha permitido esa sidrería. Tampoco entiendo por qué la caravana de Zapatero se dedicó a lanzar a Cascos". Nada, no entiende nada.
ABC también habla mucho del PSOE. En el editorial dice que están hechos polvo. "Ante la expectativa de una derrota, las bases socialistas han perdido el respeto por sus dirigentes (...) sufren una crisis de confianza en sus liderazgos". Como no le parece suficiente, le dedica otra serie de puyazos a Zapatero en un segundo editorial por su ausencia en Extremadura. "Tal vez sea el síntoma de que su figura es un lastre que los barones socialistas se esfuerzan en evitar a toda costa, abrazándose a un Rubalcaba convertido en secretario general". E Ignacio Camacho hurga un poquito más en la herida por si no ha escocido lo suficiente "Huele a derrota, a catástrofe" y a Zapatero "le huyen los candidatos" en un "intento infantil de alejarse de su halo perdedor". Pues si que empieza bien la semana para Zapatero.
En La Razón, César Vidal no da crédito a lo de los reptiles andaluces en su columna "Pícaros de nuevo cuño". "Si el caso del Palau catalán haría que Guzmán de Alfarache abriera los ojos como platos, el denominado fondo de reptiles de Andalucía no hubiese sido capaz de administrarlo Monipodio ni respaldado por toda su banda de ladrones, coimas y tahúres". Tampoco le parece bien a Iñaki Ezquerra. "Quedarse con la pasta de los desempleados de una tierra donde le paro ha hecho metástasis en todo el tejido social es una canallada 'admirable'".
La Gaceta también chincha a Zapatero. "Rubalcaba ironiza con su tirón en el PSOE frente al de Zapatero". Y atiza al presidente por utilizar otra vez el Falcon para ir a un mitin. Como Zapatero no aprende, La Gaceta le enseña "como si de Barrio Sésamo se tratase. Alguien debería explicarle a Zapatero las diferencias entre lo público y lo privado. A ver: Falcon = público; mitin electoral = privado". Pues parece facilito, así a simple vista.
En Público vuelve la enfermiza obsesión con Jiménez Losantos, esta vez de manos de Andrés Villena, que hace encaje de bolillos en una columna en la que pide "resintonizar la telebasura" para relacionar a Belén Esteban –"muchos ciudadanos dicen que no ven la tele, pero conocen los movimientos de Belén Esteban"- con Jiménez Losantos. "¿Cuántos oyentes de Jiménez Losantos escuchaban su programa en la Cope 'para reírme'". ¿A dónde quiere llegar?, se preguntarán. Pues aquí: "Quizá haya llegado la hora de reducir el número de emisoras". ¿Y en quién estará pensando para decidir cuáles?