El Mundo le endilga a Bono una portada que va a dar el lunes al presidente del Congreso. "El interventor denunció el trato de la Junta de Bono a El Pocero". "Un informe confidencial atribuye al Gobierno regional o grave dejación de responsabilidades o protección de intereses ilegítimos en la rectificación de Seseña". Y dicho informe lleva tres años en la Fiscalía Anticorrupción sin investigar. En el editorial, Pedro J. cree que "Junta y Ayuntamiento han podido caer en un delito de prevaricación y podría situar a Bono en un escenario de cohecho impropio". Toma ya.
Jiménez Losantos analiza la reacción del PP ante el fallo sobre el Estatuto. "Mariano Pangloss ha dicho que hay que pasar página, aunque no quede página de la Constitución por arrancar. Y Aznar ha precisado que no, pero que sí, pero que no, que Zapatero se ha cargado la Constitución, pero que la Constitución está a salvo, que el fallo es un fallo pero un acierto, y que, en fin, es un lío de socialistas que nos afecta pero no tanto, en el que no debemos entrar, sí, pero no".
El País cuenta en el PSOE "está muy molesto con la forma en que el PP, un en especial su líder, Mariano Rajoy ha reaccionado" ante el fallo del Estatuto. Vamos, que les molesta una barbaridad que no haya dicho ni pío así que ya se ocupan ellos de hablar por él. Otro de esos artículos que tanto le gustan a Prisa firmado por una barbaridad de gente todos a una dice que "se impone una reforma de carácter federal. El modelo de Estado de las autonomías está agotado. España no es solo un estado, en una vieja nación. Y Cataluña tiene su conciencia de nación".
ABC contraataca preguntando a seis presidentes de comunidades autónomas sobre el asunto y concluye justo lo contrario que los abajofirmantes de El País. "El Estado de las Autonomías se ha reforzado en el sentido previsto por la Constitución, es decir, como organización territorial del Estado español y sobre la base de la unidad de la nación española".
De La Razón destaca un ingenioso Puntazo. "Éxito de Zapatero como ministro de Deportes". Dice el diario que "en vista de los éxitos internacionales que están cosechando... los deportistas españoles" "son cada vez más las voces que felicitan a Zapatero como ministro de Deportes y le ruegan encarecidamente que se dedique a ellos en exclusividad y sin otras distracciones".
La Gaceta está muy indignada porque Industria les ha puesto una multa de 100.000 euros por un vídeo supuestamente xenófobo sobre el Orgullo Gay. Pero a la comunidad homosexual no le parece suficiente y exige al Gobierno que cierre Intereconomía. A mismo tiempo, denuncia que Cuatro ha emitido un vídeo que "humilla e insulta a Paraguay, pero Industria no actúa contra Prisa".
"Es nefasto que en una democracia sea la Administración y no los Tribunales, la que decida imponer sanciones", considera y cree que "el Gobierno se ha entregado a una persecución marcada por la parcialidad con que se apoya a la ideología del progresismo obediente y se quiere erradicar toda manifestación de pensamiento crítico".
Y en Público, Ana Cañil comenta que la Reina se llevó la semana pasada una bronca sensacional por llegar tarde a un concierto el día de la huelga del Metro. Cuenta que los espectadores tuvieron que esperar, en medio de la indignación, a que Doña Sofía se hiciera un hueco en el atasco y ocupara su lugar. "A los 20 minutos llegó Sofía. Y lo nunca oído. Pitidos y algún ¡fuera!, ¡fuera! Mucho asombro. Cuándo el Auditorio, con aquel personal mayoritariamente con complicidad social con la Casa del Rey, se había atrevido a una cosa así". Y se pregunta: "¿El rey y la reina dejan de ser intocables entre los suyos?". Pues no sé, pero seguramente el público se estaría preguntado que si ellos habían llegado a tiempo con muchos menos medios que la Reina, por qué ella no. Y eso fue, comprensiblemente, lo que les tocó las narices.