L D (EFE) Las fuentes consultadas, que no han explicado las razones alegadas por el Gobierno de Gambia para no autorizar el desembarco, han señalado que los Ministerios españoles del Interior y de Asuntos Exteriores han hecho todas las gestiones posibles, pero que cuando se ha comprobado que ninguna daba resultado se ha dado la orden de hacer regresar el avión a España.
Un portavoz de Exteriores dijo que el procedimiento se inició con una "misión de reconocimiento" de funcionarios gambianos que aceptó a los inmigrantes retenidos como nacionales. Una vez realizado este trámite, comenzó el proceso de repatriación "en estrecha coordinación con el ministerio del Interior".
Este proceso, según especificó un portavoz de Exteriores, incluye hacer llegar la nota informativa al Gobierno gambiano a través de la embajada en Dakar, así como la confirmación que se ha recibido la nota y la tramitación de los permisos de vuelo. "Se cumplió con todo el procedimiento. Lo sucedido responde a alguna situación interna gambiana sobre la que el ministerio (de Exteriores) no entra a especular", dijo un portavoz a Efe.
Con anterioridad a estas declaraciones, el ministerio del Interior dio orden de regresar a España al vuelo con los 101 inmigrantes. Así lo han informado fuentes de Interior, que han añadido que todos los inmigrantes habían sido "identificados y documentados" previamente por el Gobierno de Gambia y que el vuelo contaba con los permisos del Ministerio de Asuntos Exteriores del país africano.
Cuando un inmigrante es repatriado una vez acreditada su nacionalidad, han explicado las fuentes, el Gobierno de su país se ha comprometido con anterioridad a admitirle en su territorio y le ha proporcionado la documentación necesaria para viajar. Esto es lo que había ocurrido en este caso, pero cuando el vuelo ha tomado tierra a primera hora de la tarde en el aeropuerto de Banjul las autoridades gambianas no han autorizado el desembarco de sus nacionales, que viajaban custodiados por 117 policías.
Este proceso, según especificó un portavoz de Exteriores, incluye hacer llegar la nota informativa al Gobierno gambiano a través de la embajada en Dakar, así como la confirmación que se ha recibido la nota y la tramitación de los permisos de vuelo. "Se cumplió con todo el procedimiento. Lo sucedido responde a alguna situación interna gambiana sobre la que el ministerio (de Exteriores) no entra a especular", dijo un portavoz a Efe.
Con anterioridad a estas declaraciones, el ministerio del Interior dio orden de regresar a España al vuelo con los 101 inmigrantes. Así lo han informado fuentes de Interior, que han añadido que todos los inmigrantes habían sido "identificados y documentados" previamente por el Gobierno de Gambia y que el vuelo contaba con los permisos del Ministerio de Asuntos Exteriores del país africano.
Cuando un inmigrante es repatriado una vez acreditada su nacionalidad, han explicado las fuentes, el Gobierno de su país se ha comprometido con anterioridad a admitirle en su territorio y le ha proporcionado la documentación necesaria para viajar. Esto es lo que había ocurrido en este caso, pero cuando el vuelo ha tomado tierra a primera hora de la tarde en el aeropuerto de Banjul las autoridades gambianas no han autorizado el desembarco de sus nacionales, que viajaban custodiados por 117 policías.
Activación de "mecanismos"
A pesar de todo, el Ministerio de Asuntos Exteriores asegura que ha "activado los mecanismos diplomáticos habituales" para intentar resolver la situación creada. Fuentes diplomáticas ha explicado que "se van a realizar gestiones" para conocer los motivos por los que las autoridades gambianas han rechazado a los repatriados, que llegaron ayer en un avión custodiados por 117 policías.
Tras pasar unas siete horas encerrados en el avión sin permiso para desembarcar en el aeropuerto de Banjul, los emigrantes y policías regresaron a Las Palmas, donde se encuentran a la espera de que se resuelva la situación. Las fuentes del Ministerio han precisado que el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Angel Lossada, se puso en contacto con las autoridades de Gambia para intentar resolver la situación.
"Se trata de ver qué ha sucedido y conseguir que se cumpla el acuerdo de flujos migratorios que tenemos firmado con Gambia", han afirmado las fuentes, que señalaron que "la apuesta del Gobierno es siempre el diálogo".
España y Gambia firmaron en 2006 un "acuerdo de cooperación en materia de inmigración" por el que España se comprometía a donar cinco millones de euros en "ayuda inmediata" a cambio de que las autoridades gambianas colaboraran en el control de la emigración ilegal desde sus costas y aceptaran la readmisión de sus nacionales que hayan llegado a España de manera ilegal.
A éste se suma el firmado el pasado mes de febrero, el Ministerio del Interior, un acuerdo de cooperación con Gambia en materia de vigilancia y control de los espacios marítimos para lograr una mayor eficacia en la lucha contra la inmigración ilegal.
Tras pasar unas siete horas encerrados en el avión sin permiso para desembarcar en el aeropuerto de Banjul, los emigrantes y policías regresaron a Las Palmas, donde se encuentran a la espera de que se resuelva la situación. Las fuentes del Ministerio han precisado que el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Angel Lossada, se puso en contacto con las autoridades de Gambia para intentar resolver la situación.
"Se trata de ver qué ha sucedido y conseguir que se cumpla el acuerdo de flujos migratorios que tenemos firmado con Gambia", han afirmado las fuentes, que señalaron que "la apuesta del Gobierno es siempre el diálogo".
España y Gambia firmaron en 2006 un "acuerdo de cooperación en materia de inmigración" por el que España se comprometía a donar cinco millones de euros en "ayuda inmediata" a cambio de que las autoridades gambianas colaboraran en el control de la emigración ilegal desde sus costas y aceptaran la readmisión de sus nacionales que hayan llegado a España de manera ilegal.
A éste se suma el firmado el pasado mes de febrero, el Ministerio del Interior, un acuerdo de cooperación con Gambia en materia de vigilancia y control de los espacios marítimos para lograr una mayor eficacia en la lucha contra la inmigración ilegal.