En un breve comunicado también indica la escudería que no contestará las recientes alegaciones hechas por la FIA relativas al GP de Singapur del pasado año y añade que antes del comparecer ante el Consejo Mundial de la Federación Internacional del Automóvil (FIA) del próximo lunes, el equipo no hará ningún comentario.
Horas antes de conocerse la noticia, el presidente de Renault, Carlos Ghosn, se mostró cauto en sus primeras declaraciones sobre el caso. "Es Bernard Rey quien debe hablar de este tema, pero lo único que he pedido es que no se reaccione en caliente. Hemos examinados los hechos para ver qué pasó exactamente y hay investigaciones en curso", indicó en declaraciones a L'equipe durante su presencia en el Salón del Automóvil de Frankfurt.
Además, el brasileño recalcó que han trabajado "en colaboración" con las diferentes autoridades de la Fórmula 1. "No queremos que haya interpretaciones precipitadas. Esto es lo que está intentando hacer el equipo bajo la responsabilidad de Bernard Rey y por eso he depositado en él mi confianza para que, una vez se establezcan los hechos, podamos tomar una decisión más clara", apuntó.