El conocido actor ítalo-americano confiesa que cuando tenía 20 años -hace ya casi cincuenta- se prostituyó a cambio de comida y de alojamiento.
Alfred James Pacino admite en declaraciones al New York Post que, tras abandonar sus estudios en Sicilia para perseguir su sueño de ser actor, estuvo viviendo en casa de una mujer mucho mayor que él que le proporcionaba comida y una cama donde dormir. El protagonista de El Padrino, a cambio, le pagaba con favores sexuales.
"A los 20 años vivía en Sicilia vendiendo lo único que tenía: mi cuerpo. Una señora mayor me daba comida y alojamiento a cambio de sexo. Por las mañanas me despertaba odiándome un poco", relata Al Pacino al prestigioso diario neoyorquino para aclarar a continuación que se arrepiente de esa etapa de su pasado.