Menú

Las subastas a la baja fracasan: los promotores inflaban el precio de los pisos

Las subastas de pisos a la baja (o inversas) comenzaron a extenderse en España a finales de 2007 impulsadas, sobre todo, por Tulipp. La compañía abandona ahora el negocio tras el fracaso de ventas. ¿El motivo? Los vendedores inflaban el precio de salida de los pisos.

Es difícil engañar al mercado. Tulipp, empresa pionera en organizar subastas inmobiliarias a la baja en España, abandona el negocio. La firma se ha visto obligada a tomar esta decisión tras el fracaso de sus eventos en los que apenas consiguieron vender viviendas pese al impacto mediático con el que contaban.

Jorge Zanoletty, director general de Tulipp, reconoce a idealista news que parte del fracaso se debe a que los vendedores hacían, generalmente, trampas al fijar los precios inflados de salida y mínimos.

En este tipo de subastas, los vendedores ponían un precio de salida a sus inmuebles, que luego iban bajando progresivamente hasta que algún comprador decidía quedarse con el piso hasta que bajase a un precio mínimo pactado previamente con el vendedor.

Pero, todo ha resultado ser una farsa. El portal inmobiliario idealista, líder en España, ha comprobado cómo por ejemplo en el evento de mayo de 2008 en Madrid se subastaron a la baja varias viviendas con un precio de salida inflado en decenas de miles de euros. Es decir, en dichas subastas se llegaban a ofrecer pisos con un precio de salida un 20% superior al que se encontraba en el mercado.

Los vendedores trataban así de dar la sensación de aplicar grandes rebajas cuando, en realidad, lo que hacían era trampear el precio de salida de los pisos subastados. Así, por ejemplo, en una de estas subastas se ofrecía un piso en la zona de Sol (Madrid) con un precio de inicio de 300.000 euros, cuando esa misma vivienda se vendía en esos momentos en idealista.com por 270.000 euros y días después del evento se bajó a 240.000 euros.


"Es decir, si alguien hubiera comprado la vivienda al precio de salida, habría pagado más de un 10% de sobreprecio respecto al precio al que se vendía el piso sin necesidad de subasta", señala el portal.

Zanoletty reconoce que los vendedores inflaban el precio y, de hecho, en algunos casos incluso fijaban un precio mínimo igual al que tenían en ese momento el inmueble a la venta, con lo que los supuestos descuentos de hasta el 30% que anunciaba Tullip eran falsos.

El fracaso de este tipo de subastas ha sido rotundo, apenas unas decenas de compraventas. Por ello, Tulipp se pasa ahora a las subastas al alza. En este sentido, Zanoletty asegura que ni promotores ni entidades financieras confían en las subastas a la baja y que prefieren las pujas al alza, como las que organizan CB Richard Ellis, BNP Paribas Real Wstate o Caja Madrid, entre otras.

Temas

En Libre Mercado

    0
    comentarios
    Acceda a los 6 comentarios guardados