En tono de broma, Villalobos metió prisa a sus compañeros para que se pudiese levantar la sesión antes del inicio del partido de la Liga de Campeones, que esta noche a las nueve menos cuarto enfrentará al Fútbol Club Barcelona y al Inter de Milán.
La elección del futuro presidente de RTVE se realiza mediante dos votaciones nominales y en urna, de manera de los diputados son llamados uno a uno y emiten su voto mediante papeleta, lo que provoca que sus señorías tengan que guardar cola ante la tribuna de oradores.
Los secretarios de la Mesa del Congreso son los encargados de ir nombrando a sus compañeros para que se acerquen a introducir la papeleta en la urna. Como hace siempre en estos casos, Villalobos imprimió mayor brío y rapidez en la lectura de los nombres de sus colegas de Mesa, con lo que durante su turno la cola de diputados se incrementó.
"Moved el culo, que hay que ver al Barça", dijo Villalobos en tono jocoso, un comentario que fue captado por los micrófonos. Tras esta recomendación general, la que fuera ministra de Sanidad le dio el mismo consejo, pero esta vez personalizado, a la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega: "Vice, que hay que ver al Barça", le dijo cuando subió a la tribuna para emitir su voto en la primera ronda de votaciones.
En la segunda votación, cuando tuvo al lado al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, declarado seguidor del Real Madrid, le dijo: "Venga, que hay que ver perder al Barça". El ministro le contestó algo que los micrófonos no reprodujeron y luego se oyó a Villalobos concluir: "Yo espero que gane". "Venga, chicos, ya", había apostillado antes, después de acusar a un diputado de haberse "colao".
Las votaciones, que se prolongaron durante casi una hora, dieron lugar a otras intervenciones no exentas de sorna. El secretario primero de la Mesa, el socialista Javier Barrero, se jactó de la "tarea tan sobresaliente y tan magnífica" que se les había encomendado al pasar el testigo de la lectura al secretario segundo, el peneuvista José Ramón Beloki, quien le contestó con una sonrisa.
Fuera o no por las prisas de Villalobos, lo cierto es que la sesión plenaria se levantó a las ocho y media de la tarde, con tiempo suficiente para que sus señorías pudieran ver al equipo que entrena Guardiola.