El exportavoz de Batasuna Arnaldo Otegi ha recusado al tribunal de la Audiencia Nacional presidido por la magistrada Ángela Murillo y compuesto por los magistrados Teresa Palacios y Juan Francisco Martel. Todos ellos formaron parte de la Sala que juzgó en enero de 2010 al proetarra por enaltecer el terrorismo de ETA en el homenaje al preso de la banda criminal José María Sagarduy en la localidad vizcaína de Amorebieta en el año 2005.
Durante la celebración de dicha vista oral, la presidenta del tribunal preguntó a Otegi si condenaba la violencia de ETA. El batasuno no respondió a esa cuestión y Murillo le replicó que "ya sabía yo que no me iba a contestar a esta pregunta". Sin embargo, esa pregunta y el comentario posterior de la presidenta de la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal fueron el motivo que llevó el pasado 8 de febrero al Tribunal Supremo a anular la condena al proetarra por estos hechos y a ordenar repetir este juicio pero con un tribunal compuesto por jueces distintos. Previamente, la Audiencia había condenado a Arnaldo Otegi a la pena máxima prevista en el Código Penal para los delitos de exaltación del terrorismo: dos años de cárcel.
Ahora, y como consecuencia de la decisión del Alto Tribunal, el proetarra ha recusado a la Sala que lo juzgó. El motivo es que si Otegi no aparta ahora a Murillo será la misma Sección Cuarta de la Audiencia Nacional la que deberá juzgarle en un futuro próximo por la reconstrucción de Batasuna bajo la plataforma Bateragune. Si la recusación no prospera la juez Ángela Murillo volvería a tener enfrente en el banquillo de los acusados a Otegi en los próximos meses; algo que éste trata ahora de impedir.
Según señalaron fuentes jurídicas, el incidente de recusación del proetarra se encuentra en estos momentos en la secretaría de la Sala de Gobierno de la Audiencia Nacional a la espera de que comience a tramitarse. Atendiendo al artículo 69 de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ), "una sala formada por el presidente de la Audiencia Nacional, los presidentes de las Salas y el magistrado más antiguo y más moderno de cada una, o aquel que respectivamente, le sustituya, conocerá de los incidentes de recusación del Presidente, de los Presidentes de sala o de más de dos magistrados de una sala".
Una vez que el presidente de la Audiencia Ángel Juanes convoque a la sala conocida como ‘Sala del 69’, ésta deberá nombrar por turno a un instructor del incidente de recusación –entre los magistrados de la Sala de lo Penal- y a un ponente del incidente –entre los jueces que forman la propia Sala-.
El juez instructor podrá entonces practicar las pruebas que considere oportunas para ver averiguar si Murillo, Palacios y Martel fueron parciales a la hora de juzgar a Otegi por el homenaje al etarra Sagarduy y elevará su informe al magistrado ponente que deberá pronunciarse sobre la idoneidad de admitir a trámite o rechazar la recusación. La última palabra la tiene la Sala presidida por Juanes que deberá decidir si aparta o no al tribunal. En caso de que se acepte la recusación de Ángela Murillo, la Sala del 69 nombrará a otro tribunal compuesto por otros tres magistrados para juzgar a Arnaldo Otegi por Bateragune.