El mexicano Alejandro Fernández sufrió una grave lesión tras ser mordido por su propio perro hace 20 días, quedando una grave herida en la pantorrilla izquierda que a punto ha estado de tener consecuencias realmente graves.
Pese a los cuidados locales aplicados, la lesión se complicó y el artista tuvo que ingresar en el hospital de urgencia de Puerto Vallarta para ser sometido a cirugía. Naturalmente, su agenda profesional se vio gravemente afectada, y Fernández tuvo que cancelar todos sus conciertos previstos.
Ahora, el estado del intérprete mejora, si bien lentamente. Alejandro Fernández ha corrido peligro mortal, tal y como sus mismos representantes reconocen. Él mismo ha mostrado fotos de sus paseos de recuperación en su rancho de Guadalajara en su cuenta oficial de Facebook.
Reposo total y recuperación, tal y como él mismo asegura en Facebook. Allí, Fernández ha asegurado ser consciente de los riesgos, pero no guarda rencor alguno a su perro. "Soy consciente de que la mordida de Kush fue un accidente desatado por un juego, amo a mis perros y lo que más quiero es darles lo mejor".