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La metáfora más desafortunada de Ortega Cano: "Es un atropello hacia mí"

El diestro está cansado de líos, exclusivas de otros y cruces de declaraciones. No quiere saber nada del asunto.

El diestro está cansado de líos, exclusivas de otros y cruces de declaraciones. No quiere saber nada del asunto.
Ortega Cano | Archivo

José Ortega Cano ha querido salir al paso de las especulaciones sobre su pasado, presente y futuro para zanjar de una vez por todas todo lo que se está rumoreando estos días: el embarazo de Michu, sus desavenencias con Rocío Carrasco, las declaraciones de Amador Mohedano en las que saca la cara por él asegurando que él y su hermana Rocío Jurado fueron felices mientras estuvieron juntos, la supuesta aversión que tenían en la familia hacia Fidel Albiac o su supuesta mala relación con María Teresa Campos y su hija Terelu.

El tema obligatorio en estos momentos son las últimas noticias relativas a la relación de su hijo, José Fernando Ortega, con Michu. Y es que la pareja podría volver a estar embarazada, tras el fallido intento de este verano. A este respecto el diestro ni confirma ni desmiente, pero parece evidentemente decepcionado con cómo está llevando su vida José Fernando: "No puedo opinar, son cosas muy serias y no es cuestión de decir si ahora es verdad y luego mentira".

Ortega Cano se limita a negar con la cabeza cuando se le pregunta si ha hablado al respecto con su hijo. Ya en el pasado aseguró saber muchas cosas, demasiadas, que no había contado. Y lo mismo ocurre sobre el piso donde José Fernando y Michu viven, aspecto sobre el que no "puede decir nada". En general, Ortega se niega a entrar en los temas de actualidad relativos a su familia, incluyendo la supuesta mala relación con Terelu y María Teresa Campos, que niega tajantemente.

Hace dos semanas, Amador Mohedano se sometió a un polígrafo en el Deluxe en el que, entre otras cosas, defendió a Ortega y acusó a Rocío Carrasco de dejarse manipular por su marido, Fidel Albiac, lo que habría potenciado ese irrecuperable deterioro de sus relaciones familiares. El torero se muestra tan hastiado que se niega incluso a reconocer esa defensa de Mohedano: "En realidad yo no he hecho nada para que me defiendan. Se está hablando de una historia que no me pertenece, es un atropello hacia mi persona y hacia mi vida", en desafortunada metáfora.

Tan frustrado está Ortega Cano que cuando los reporteros deEuropa Press le piden que deje un mensaje a sus familiares, el marido de Rocío Jurado solo desea que le dejen en paz. "Que me dejen tranquilo que yo solo me dedico a mi vida". Y anticipa que no habrá exclusiva por su parte: "No, no, en mi vida. Yo haré lo que he hecho siempre, una vida familiar, deportiva y sana, a ser posible, sana".

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