El actor Ricardo Darín siempre se ha caracterizado por su derroche de simpatía y buen sentido del humor. Sin embargo, esta semana realizaba una de sus confesiones más duras al revelar en una campaña contra la violencia machista en Argentina, organizada por la revista Susana, algunos momentos de su infancia como ejemplo para ayudar a personas que se encuentren en la misma situación.
A pesar de ser uno de los actores argentinos más exitosos, Darín no tuvo una infancia fácil. Según explica en la revista, la extrema situación entre su padre y su madre era tan complicada que le resultaba difícil conciliar el sueño cuando se iba a la cama: "Yo era el último que se dormía en mi casa. Si se suscitaba algún tipo de discusión después de la cena, cuando nos íbamos a dormir, yo me asomaba mirando a mi hermana en la cama de abajo y la veía con los ojos, esos tremendos y maravillosos que tiene, muy abiertos. Y a ella le pasaba lo mismo que a mí, pero era mucho más chiquita y no terminaba de comprender la situación".
"Me paré frente a mi papá, con 12 años y le dije: 'Me parece que te tenés que separar', recuerda Darín durante la entrevista. "Él me pregunto '¿estás seguro?' y yo le dije 'sí, estoy completamente seguro, te tenés que separar porque ustedes dicen quererse, pero se llevan como el culo y estamos sufriendo todos'. A él se le llenaron los ojos de lágrimas, me miró y me dijo: 'Bueno'. Aparentemente lo que ocurría es que los dos sabían lo que tenía que pasar, pero ninguno de los dos se atrevía a tomar la decisión".
Una entrevista en la que el actor detalla una infancia marcada por la violencia psicológica que ejercían los padres sobre los hijos debido a la mala relación que mantenía el matrimonio. Una violencia que también fue física, según relata, asegurando sentir "pánico al pensar que se pueda repetir en mi vida adulta".