Georgina Rodríguez ya está en plena operación de conquista italiana, tras la marcha de su novio Cristiano Ronaldo al Juventus de Turín. Esta misma semana se ha paseado de manera espectacular por la alfombra roja del Festival de Venecia, recogiendo mejores críticas que muchas películas gracias a su estilizado conjunto negro.
Pero Georgina tiene secretos. Eso es lo que ha difundido en Telecinco el programa Sálvame, que este jueves abordó largo y tendido la precaria vida de algunos familiares de Georgina en Lorca (Murcia).
En concreto, con su abuela Juana, que cuidó de Georgina en su infancia y ahora tiene 82 años. La anciana se vio obligada a abandonar su vivienda debido a una deuda de 3.000 euros a consecuencia de la mala gestión de uno de sus hijos. Juana llamó a su nieta y bromeando comentó: "Hombre, Georgina, a ver si me mandas 1.000 euros". Desde aquel momento, perdieron cualquier contacto con la bailarina.
Además, el padre de Georgina está ingresado en Buenos Aires debido a un derrame cerebral y todavía no ha recibido visita alguna de su mediática hija.
Georgina no mantiene contacto con ninguno de los dos y, de hecho, la última conversación que tuvo con su padre fue el día de su cumpleaños, una fecha que el programa no pudo precisar.
La modelo solo mantiene contacto con su madre, su hermana Ivana y, según fuentes cercanas citadas por Sálvame, a los demás los ignora.