Menú

Las eternas dudas amorosas de Pablo López

El cantante Pablo López, descubierto en OT, tiene una vida personal compleja.

El cantante Pablo López, descubierto en OT, tiene una vida personal compleja.
Pablo López | Cordon Press

Es Pablo López una de las voces más interesantes del pop melódico nacional de los últimos años, descubierto a través de Operación Triunfo en su sexta edición, la de 2008, cuando llegó a ser finalista. A sus treinta y seis años, a tenor de sus respuestas cuando es entrevistado, da la impresión de ser un tipo complejo, con algunos miedos y neurosis. Le sirven para componer muchas de sus hermosas y poéticas letras. Sus dudas parece también que las ha llevado al terreno amoroso: no será el único desde luego en esa cuestión. Pero es el caso que rompió con su novia de siempre, tras doce años de relación, estuvo dos algo despistado con otras parejas, hasta reanudarla con aquella, una guapa farmacéutica llamada Laura Devesa, que fue campeona de gimnasia rítmica.

Natural de Fuengirola, donde nació en 1984, se interesó por la música desde muy niño. Tanto es así que, a los cinco años, quiso que su madre le proporcionara un piano. Pero tuvo que contentarse con una guitarra. Faltaba el padre en aquel hogar, porque lo abandonó teniendo Pablo sólo cinco meses. El señor López trabajaba en un hotel de la Costa del Sol malagueña, donde su esposa era recepcionista. Tarifaron. Y él se dedicó a la venta de pisos. Pablo López no acusó aquella ausencia paterna hasta que conforme fue creciendo pudo conocer a su progenitor, que falleció en 2014. Llegó a conocer el triunfo de su hijo como cantante.

malu-pablo-lopez-2.jpg
Con Malú en La Voz | Archivo

Cuando se cuentan historias de ídolos de la canción, el cine o cualquier otra actividad de cara al público no hay que ignorar las dificultades que muchos de ellos encuentran hasta conseguir serlo, desconociéndose el gran número de aspirantes que se quedaron en el camino. Pablo López supo labrarse su porvenir estudiando tenazmente, pero siempre ilusionado, en el Conservatorio de Música de El Ejido (Almería). Fueron diez años de provecho. Amén de la música clásica se empapó de cuanto le gustaba acerca del rock y el pop. Con todos sus conocimientos formó un grupo juvenil, aunque tuvo otras experiencias personales que fueron esenciales para ser un admirado cantautor.

Había pensado en un principio ser periodista. Como colega nuestro no sé si sus trabajos hubieran trascendido, porque la música la llevó siempre en su mente y en su corazón. Tocaba con diecisiete años en las salas de fiesta de varios hoteles de la costa malagueña. Y como quería aprender inglés se marchó a Londres, hizo lo que tantos jóvenes en ese trance: ganarse la vida como camarero. En sus horas libres se iba abrazando su guitarra a las puertas de alguna estación de "Metro", manera de ayudarse en su modesto peculio y de ir perdiendo la timidez ante un público desconocido.

En 2005 conoció a Laura Devesa. Ya dijimos la especialidad deportiva que practicaba. En la actualidad ejerce de farmacéutica. Doce años son muchos en la relación de dos jóvenes. Por cansancio, porque Pablo estaba en plena fiebre de éxito con sus canciones, por lo que fuera, el caso es que rompieron su compromiso. Y a partir de entonces es cuando el malagueño anduvo con otras mujeres, aunque nunca quiso con ellas plantearse más allá de una buena amistad en unos casos, o íntima en otros. Era el año 2017, llevaba nueve como uno de los más afortunados intérpretes salidos de la academia de Operación Triunfo, gozaba de popularidad, dinero, con un buen físico, por lo que no le resultaba difícil conquistar a más de una admiradora. Entre ellas, en su biografía sentimental desde que se diera a conocer en aquel concurso, figura su colega Miriam Rodríguez. Y cuando rompió con Laura salió cierto tiempo con una estudiante de Ciencias de la Información, Claudia Nieto. Coincidió en La Voz con Malú, entonces sin ningún acompañante fijo, y simpatizaron un tiempo. Sabido es que luego la sobrina de Paco de Lucía conoció al político Albert Rivera y sellaron su amor, ahora tan felices con su hijita. Mientras tanto, Pablo José López Jiménez iba deshojando la margarita: ¿debía reconciliarse con Laura Devesa, su antigua novia? Y el resultado fue que debía llamarla. Así es que reemprendió aquel amor roto y hasta hoy.

Ha contado Pablo que las semanas del confinamiento las pasó en su estudio madrileño preparando su gira veraniega, ya iniciada cuando escribimos estas líneas, con un repertorio de sus cuatro álbumes. Lleva por título "Unikornio". Una de sus últimas canciones es "Mariposa", en la que el cantautor tiene la esperanza de que sea un nuevo éxito, así como también "Colapso".

Este artista confiesa que desde hace mucho tiempo padece miedos repentinos, manías como la de no subirse a veces a un ascensor. Alguna depresión, como cada quisque. Es alguien que medita mucho. No está claro si en verdad visita a un psicoanalista, como pueda desprenderse de algunas de sus entrevistas. Lo que sí tiene más claro que el agua es defenderse de la intromisión en su vida de quien quiera enterarse de sus intimidades. Serán escasas las fotos que haya de sus parejas. Sobre todo de la más estable, Laura Devesa. Vive bien a su aire. Independiente, sugiere en sus contestaciones que le va mejor no comprometerse con nadie. Cuida algunas amistades, como la de David Bustamante. Es íntimo de Antonio Orozco; ambos bromean sobre sus amores. En definitiva, Pablo López es difícil de definir. Mejor nos atenemos a lo que escribe, por ejemplo en "Mariposa". Un retazo tan sólo: "Quiero ser una polilla, una mariposa con las alas rotas". O sea, piensa uno: ir libre por la vida, hasta que ésta nos castiga y no nos deja volar. Quizás aluda a este tiempo de miedo por la pandemia.

Temas

En Chic

    0
    comentarios