Paloma Cuevas y Enrique Ponce continúan sin firmar el divorcio

Ya han pasado 3 meses desde que la saltó la noticia de la separación de Paloma Cuevas y Enrique Ponce, un hecho inesperado que sorprendió tanto que no han cesado al día de hoy,de correr ríos de tinta, como se suele decir de una manera coloquial.

En principio parecía que los tramites de ese divorcio iban a ser lo más rápidos posible, al no haber problema alguno por ambas partes y hacerse todo de total acuerdo. El caso es que de momento la firma todavía no ha llegado por parte del diestro.

Paloma, desde un primer momento, se ha mantenido en un plano mucho mas discreto que Enrique, que no ha parado de demostrar lo feliz que está junto a su actual amor, la jovencísima Ana Soria. De hecho, ya viven juntos en una urbanización en una zona residencial de Almería, de donde es la novia.

Hoy, 25 de Octubre, Paloma y Enrique, se dieron “Sí Quiero” en la catedral de Valencia, hace 24 años. Una boda que fue todo un acontecimiento social. Hasta recibieron la bendición papal, y la misma asistieron mil invitados.

Los bienes que tienen en común son dos propiedades en Madrid, un piso en el Paseo del Pintor Rosales, y una casa en la exclusiva urbanización La Finca, en Pozuelo de Alarcón, regalo de Victoriano Valencia, padre de Paloma. Aparte de la finca “La Cetrina”, en la provincia de Jaén, donde Paloma ha estado refugiada durante todo el verano, fuera de focos mediáticos, a raíz de hacerse publico el final de su matrimonio.

Nada que ver con su todavía marido, que no ha dejado de demostrar el amor que siente por su joven novia, Ana Soria.

Las hijas del matrimonio, Paloma y Bianca, se quedarán con su madre, ya que Enrique por su profesión se ve obligado a viajar de manera permanente. Es posible que, en un futuro, se trasladen a continuar sus estudios fuera de España, bien a Suiza, o a Estados Unidos, por el momento y dadas las circunstancias por el Covid, permanecerán en Madrid.