Fue un mito de la pantalla y todavía su nombre sigue sonando con fuerza. Pepa Flores, Marisol, vive alejada de las cámaras, los focos y los escenarios que la vieron crecer. Una tormentosa vida que, lejos de la sonrisa que lucía en cámara, acabó por devorar al personaje consiguiendo que su único deseo fuera alejarse del mundo de la farándula, refugiada en su Málaga natal.
Este 4 de febrero Pepa Flores cumple 73 años. Ya ha pasado un año desde que le fue concedido el Goya de Honor, un momento muy esperado por miles de seguidores de la artista porque podía suponer su reaparición. Pero, en su lugar, recogieron el premio sus tres hijas, María, Celia y Tamara, que subieron al escenario orgullosas y emocionadas para homenajear a su madre. Respetando la decisión firme que tomó Pepa a mediados de los 80, sus hijas dejaron claro que ahora tenía la vida que siempre había soñado.
Tras su carrera profesional como actriz y cantante, Pepa Flores llegó a confesar públicamente que durante su mejor época como artista había sufrido acoso, y un reportaje de la revista Vanity Fair en 2018 volvió a poner sobre la mesa en infierno por el que pasó la niña prodigio más querida de España. La publicación rescató unas declaraciones de Marisol al fallecido escritor Francisco Umbral, que aunque fueron realizadas para una biografía, nunca llegaron a ser publicadas. La protagonista nunca se manifestó acerca de aquello a pesar del revuelo mediático, respetando así su pacto personal de silencio.
¿Autorizado por Pepa?, se preguntó en Es la mañana de Federico Carmen Jara sobre el reportaje. Se trata, al fin y al cabo, de un reportaje realizado a partir de declaraciones de Marisol a Francisco Umbral, que aunque fueron realizadas para una biografía, nunca llegaron a ser publicados. La que fuera niña prodigio, en todo caso, aún no se ha manifestado acerca de estas declaraciones que han generado toda una tormenta mediática.
Carmen Jara, amiga personal de la artista, confirmó entonces en esRadio que "la niña estuvo tremendamente explotada". "Ella era una niña y estaba durmiendo, y cuando llegaban de las fiestas y las cenas, la despertaban y la hacían cantar para los invitados". Las malas experiencias de Marisol con los Goyanes –con cuyo hijo (Carlos) acabaría casándose durante un breve lapso de tiempo–, son sobradamente conocidos. "Cuando la madre de Marisol iba a esta casa para comer con su hija, los Goyanes la hacían comer con el servicio", desveló Marisol en la entrevista con Umbral. Carlos Goyanes, hijo de su descubridor y quien se convertiría luego en marido de Marisol, negó la mayor al respecto. Lo único seguro es que Pepa "sufrió mucho de pequeña", sin que nadie entonces notara nada. "Su madre fue la discreción total, siempre sonriendo", dijo Jara sobre María González, que falleció en septiembre de 2018 a los 95 años.