Basta con leer en ‘X’ los comentarios a la noticia que este jueves avanzaba Martín Bianchi en El País para comprender que prácticamente todo el mundo querría contar en su álbum vital con una foto realizada por Annie Leibovitz. Por el objetivo de la cámara de la retratista americana ha pasado lo más florido del mundo del arte, el espectáculo o la cultura.
Sus instantáneas provocan impacto mundial y nos traen a la retina imágenes que han pasado a la historia. Es la autora que captó a John Lennon abrazando a Yoko Ono desnudo pocas horas antes de su muerte, retrató a una Demi Moore embarazadísima para la portada del Vanity Fair o provocó a Mijail Gorbachov para que posara junto a una maleta de Louis Vuitton con el Muro de Berlín de fondo en una campaña de publicidad de la marca de lujo por excelencia.
Ahora, el Banco de España ha decidido contratarla para que realice un retrato oficial de los reyes de España, coincidiendo con su décimo aniversario en el trono y sus veinte años de casados. Una decisión que ha partido del organismo público pero que no podría realizarse sin la connivencia de los Reyes. Ellos mismos admiran su trabajo y la prueba es que la reconocieron con el premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades en 2013.
Asombro en la AFPE
Sin embargo la elección ha provocado la sorpresa de los fotógrafos españoles representados por la Asociación de Fotógrafos Profesionales, que no entienden cómo no han mirado para casa y han escogido a alguno de los 250 expertos que forman parte de este organismo.
Genaro Massot, vocal de la junta directiva de esta asociación, defiende y admira el trabajo de la norteamericana. Eso es indiscutible. Pero su elección le provoca bastante sorpresa, teniendo en cuenta el nivel de la cantera de fotógrafos que hay en España. "Si es por ignorancia deberían haberse dejado asesorar. Si es por capricho, me parece menosprecio", responde a Es La Mañana de Federico.
Y más teniendo en cuenta que la reina Letizia al cumplir los 40 eligió a una fotógrafa española, Cristina García Rodero, para retratar su intimidad familiar. El resultado fueron 16 instantáneas en las que posaba con Felipe VI y sus hijas en los jardines del Palacio de la Zarzuela.
Desde la AFPE califican la decisión del Banco de España de "postureo" y defienden la labor de sus asociados. 250 profesionales que decidieron unirse en 1984 con el fin de proteger sus derechos y promocionar sus creaciones.
Pocos detalles se conocen del acuerdo. Que el Banco habría desembolsado 135.000 euros por el encargo y que Leibovitz aterrizará en España en unos días para empezar a prepararlo. No se sabe dónde será el posado ni cuántas horas tendrán que dedicar nuestros monarcas a pararse ante su cámara. O si su sorpresa al ver el resultado será mayúscula, como le ocurrió a Isabel II cuando descubrió el retrato que hizo de ella Lucian Freud. Un cuadrito de apenas un palmo que refleja a una soberana ajada y desfigurada (los más remilgados dirán "cruda y descarnada") y que dejó a los británicos anonadados.