Por si no fuera suficiente con la sequía, los agricultores están desesperados por la plaga de conejos híbridos que ya ha arrasado más de un millón de hectáreas y por la que más de 1.400 municipios de toda España han declarado la emergencia cinegética. Sin embargo, no deben ser conejos suficientes para el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico liderado por Teresa Ribera, porque está recomendando a los promotores de los parques fotovoltaicos de todo el país que metan más conejos en sus tierras para un control ecológico de la vegetación natural en el interior de las plantas.
Prácticamente todas las resoluciones de la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental sobre las declaraciones de impacto ambiental de los proyectos de las plantas fotovoltaicas incluyen exactamente el mismo texto sin pensar en las terribles consecuencias de lo que plantea: "En caso de revelarse necesario, el control de la vegetación natural en el interior de la planta se realizará preferentemente mediante el fomento de la población de lagomorfos silvestres o por pastoreo de ganado ovino". Los lagomorfos silvestres son conejos o liebres, los mismos que ya han provocado pérdidas por encima de los 800 millones de euros debido a su voracidad.
Pero es que, para más recochineo, las indicaciones de esta dirección dependiente del ministerio de Ribera señalan que "el control mecánico de la vegetación se limitará a circunstancias excepcionales que no hayan podido preverse, y se realizará evitando el periodo crítico de reproducción de la mayoría de las especies". Es decir, que no hay que usar una desbrozadora por si acaso perturba el proceso de reproducción de las conejas, que pueden tener siete camadas de unas seis crías al año.
Esta recomendación se puede encontrar en la resolución del 27 de diciembre de 2022 de los parques de fotovoltaicas en las provincias de Alicante, Albacete y Valencia. También en las del 18 de enero de este año para la provincia de Sevilla o en la del 19 de enero de los parques de Yunclillos (Toledo) y Parla (Madrid). Vamos, más conejos repartidos por toda España gracias al ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico.
La voz de alarma la ha dado la organización agraria ASAJA de León, que alertó de que la Junta de Castilla y León había realizado esta recomendación a los promotores del macroparque de paneles solares fotovoltaicos Mensa Solar en Villamoratiel de las Matas. Una vez más, la misma redacción, resultado posiblemente de un imprudente copia-pega.
ASAJA también ha recordado que los lepóridos, y en particular los conejos, son hoy día una plaga del campo, que salvo cuando padecen enfermedades infecto-contagiosas que diezman sus censos, causan verdaderos estragos en la agricultura, arrasando con todo tipo de cultivos y cosechas. En este sentido, ASAJA y otras organizaciones agrarias se han dirigido en reiteradas ocasiones, sin respuesta satisfactoria, al titular de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, pidiendo medidas de control y compensaciones por los daños.