Telegram, es una conocida aplicación de mensajería instantánea, que da cabida a través de sus canales todo tipo de contenidos. Desde anuncios de venta de drogas o armas a imágenes explícitas de guerra. Su fundador, Pavel Durov, defiende la privacidad de los usuarios por encima de todo, lo que facilita los usos ilícitos o fraudulentos. Durov tampoco respeta los derechos de autor. En la aplicación se difunde sin ningún tipo de permiso programas enteros televisión. Ocurre con los contenidos de Mediaset, A3Media y Movistar+, que por ese motivo denunciaron a Telegram. Y esa es la decisión que tiene que tomar ahora el juez Pedraz, si prima el derecho a la información o el derecho a la propiedad intelectual.