En la era actual del consumo masivo mandar a reparar los electrodomésticos y demás aparatos del hogar (como por ejemplo los móviles) tiende a ser visto por muchos como una práctica anticuada. Se asume que lo más sensato es proceder a reemplazar el frigorífico, el horno o el lavavajillas estropeado por otro nuevo ante la más mínima avería ya que la bajada del precio de los electrodomésticos en las últimas décadas ha facilitado la renovación periódica de los aparatos del hogar cada pocos años de manera asequible.
Los principales fabricantes de electrodomésticos han sabido sacar partido de esta mentalidad social para aumentar exponencialmente la venta de aparatos del hogar; no es un secreto que las grandes marcas hacen uso de técnicas controvertidas de diseño industrial como la obsolescencia programada para introducir, de manera intencionada, puntos débiles en el diseño de los aparatos del hogar para asegurarse de que, pasados unos pocos años de uso, éstos se averíen.
Sin embargo, en los últimos años, con una inflación en constante ascenso y una creciente conciencia social sobre el impacto medioambiental del consumo masivo de electrodomésticos, la elección de reparar en lugar de reemplazar se ha convertido en una opción cada vez más atractiva que se fomenta a través de iniciativas gubernamentales.
Las nuevas legislaciones para incentivar la cultura de reparar
Tanto la Unión Europea como el gobierno español se encuentran actualmente preparando nuevas leyes que pretenden revitalizar el mercado de las reparaciones e incentivar la cultura de reparar.
En el caso de la Unión Europea, se ha alcanzado este año 2024 un acuerdo entre el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea para promulgar una normativa sobre el Derecho a Reparar que pretende fomentar "el desarrollo de una economía circular más respetuosa con el medio ambiente al hacer que las reparaciones sean más fáciles y atractivas para los consumidores". Entre otras medidas, esta normativa tiene como objetivo obligar a las empresas a poner recambios a disposición de los clientes a un precio asequible y a ampliar en mínimo 12 meses la garantía de los electrodomésticos averiados y reparados durante el periodo de garantía.
Del mismo modo, también tiene como objetivo la creación de una plataforma de reparación en internet para aumentar la transparencia de los servicios de reparación y darle mayor visibilidad a los talleres permitiéndole a los usuarios contactar fácilmente con centros de reparación cercanos a su zona.
Por otro lado, en el caso del gobierno español, el Ministerio de Consumo exigirá a través de la nueva "Ley de Consumo Sostenible" la inclusión de lo que se ha denominado como Etiquetas de Reparabilidad en los electrodomésticos del hogar. Estas etiquetas incorporarán información acerca de la facilidad de reparar los electrodomésticos nuevos, acerca de la disponibilidad de recambios y acerca del coste relativo de reparar los aparatos en comparación con el precio de los mismos. Estas etiquetas otorgarán una puntuación de 0 a 10 a cada electrodoméstico en función de la reparabilidad que tengan.
Beneficios de reparar vs comprar nuevo
Los beneficios de reparar sobre comprar nuevo se pueden evaluar bajo los puntos de vista económico y medioambiental.
Desde el punto de vista medioambiental, de acuerdo a las autoridades europeas, la gran mayoría de los electrodomésticos del hogar se desechan prematuramente, generando más de 35 millones de toneladas de residuos y 261 millones de toneladas de emisiones de gases de efecto invernadero en los países de la Unión cada año. Por lo tanto, si estos electrodomésticos se repararan en lugar de ser desechados prematuramente, se reduciría enormemente el impacto sobre el medioambiente. Además, los electrodomésticos desechados a menudo terminan en vertederos, donde pueden tardar siglos en descomponerse y liberan sustancias tóxicas en el medio ambiente. Reparar y reutilizar reduce la cantidad de residuos electrónicos, contribuyendo a una gestión de residuos más sostenible y responsable.
De la misma manera, que los electrodomésticos del hogar cuenten con un grado alto de sostenibilidad es cada vez más importante para los españoles, de acuerdo al eurobarómetro que mide la opinión publica en los países de la Unión. Los ciudadanos están dispuestos a asumir mayores costos a cambio de adquirir electrodomésticos más sostenibles y respetuosos con el medioambiente, lo que indica que en caso de que la reparación sea factible se puede incentivar esta opción para reducir el impacto en el medioambiente con el auspicio de los ciudadanos.
Por otro lado, desde el punto de vista económico, mandar a reparar se ha puesto de moda de nuevo en los últimos años debido a la inflación, que ha disparado el precio de los electrodomésticos nuevos y ha convertido a la reparación en la mejor opción para ahorrar.
De acuerdo a Alejandro Duque, gerente de Servicios técnicos de Valencia S.L., empresa dedicada a prestar servicio técnico en Valencia ciudad y alrededores para electrodomésticos de gama blanca y equipos de climatización "desde hace 3 años, a raíz de la aparición de la inflación y la subida de precio de los electrodomésticos nuevos, la demanda de nuestros servicios de reparación se ha duplicado a comparación con los niveles de demanda que había en el año 2019", indica. Al igual que Servicios técnicos de Valencia S.L., son muchos los talleres, empresas y centros de reparación de todas partes de España que reportan un incremento similar en la demanda de sus servicios.
La cuestión es que reparar suele ser siempre más rentable que comprar nuevo, el problema es cuando el recambio que se tiene que cambiar tiene un precio elevado. Hasta ahora, los fabricantes buscaban seguir cobrándolo a un precio elevado, en algunos casos con la intención de hacer inviable la reparación. No obstante, la nueva normativa europea obligará a los fabricantes a poner a disposición de los clientes recambios a precios razonables que faciliten la vía de la reparación.
Aspectos a tener en cuenta para mandar a reparar con éxito
A la hora de mandar a reparar, es necesario poner atención a ciertos aspectos para asegurarse de que la reparación se llevará a cabo con éxito, a un precio razonable y reponiendo el normal funcionamiento del electrodoméstico con todas las garantías:
-Una vez el electrodoméstico presente la avería, se recomienda utilizar internet para averiguar la posible causa de ésta a través de cualquier código de error o a través de los síntomas que presente el aparato. En algunas ocasiones es posible encontrar la causa de la avería y solucionarla sin necesidad de llamar a un técnico, pero en el caso de que la avería sea más compleja y sea necesario acudir a un profesional, tener una idea general acerca de qué le ocurre al electrodoméstico es aconsejable, para supervisar el trabajo del técnico y para asegurar un cobro justo por el servicio de reparación.
-Asegurarse de que el técnico que se contrata está debidamente cualificado y que forma parte de una empresa registrada autorizada por el Ministerio de Industria para realizar la labor de servicio técnico. El registro industrial de cada Comunidad Autónoma es un registro público en el que es posible verificar qué empresas están autorizadas para trabajar con instalaciones de gas, instalaciones frigoríficas que funcionan con gases fluorados o aparatos eléctricos entre otras. Igualmente, asegurarse de solicitar una factura por cualquier servicio realizado. Esto servirá para poder exigir responsabilidades por el resultado del servicio, incluida la garantía, que por ley tiene que ser de mínimo 3 meses.
-Finalmente, a la hora de contactar con una empresa de asistencia técnica, asegurarse de preguntar siempre tarifas por desplazamiento, revisión y diagnóstico de avería de antemano. Si es posible, es conveniente describirle por teléfono al teleoperador los síntomas de la avería del electrodoméstico en caso de que sea posible recibir un presupuesto orientativo por teléfono. De esta forma se podrá tener una idea aproximada del coste de la intervención y se evitarán sorpresas desagradables relacionadas con recargos excesivos inesperados.