Dice la contraportada de este libro que se trata de una "novela oscura, elegante y brutal, calculada al milímetro y tallada con una maestría literaria". Flaco favor le hace esta retahíla de calificativos, que enmascaran lo que realmente es: una atípica pero buena novela negra.
Redención, de Julio Castedo (editorial Planeta), es atípica porque no hay un policía persiguiendo a un asesino. Lo que hay es un abogado de una compañía de seguros (policía retirado, eso sí) que busca al afortunado destinatario de una póliza. Lo que no consigan las aseguradoras, no lo consigue nadie. Así comienza a tejerse esta obra en la que se alternan dos historias (abogado y desaparecido), en dos escenarios (Inglaterra y España), y en dos tiempos (pasado y presente).
John Ellerman es el destinatario de ese seguro, un joven que ha desaparecido sin dejar rastro. Paul Lancaster se las tiene que ingeniar para seguirle la pista desde sus orígenes en una inquietante campiña inglesa, pasando por el Londres de los años 80 y terminando en Ribadesella. Y, entremedias, nos encontramos continuos guiños a la cultura, tradición y estilo de vida anglosajón. La recreación del barrio de Marylebone (con ese guiño al mejor Sherlock Holmes de Baker Street), la gastronomía, la meteorología desapacible... Tan british como un traje de tweed.
Nuestro protagonista huye con el fin de enmendar el pasado, y modificar su destino. Una reinvención de uno mismo, sin dejar huella. Quizá queden víctimas en el camino, aunque siempre se puede volver a recogerlas... (quién sabe si con suerte, la vida cambia y se puede hasta regresar a lucir palmito a bordo de un deportivo rojo). Es un viaje en el que también experimenta un cambio personal, el descubrimiento de las emociones o la sexualidad.
"Los cinco signos veniales de la seducción -la mirada oblicua, el balanceo de caderas, la sonrisa, la armonía corporal y la inaccesibilidad- no son más que sutiles agresiones al subconsciente, tretas de la evolución al servicio de las mujeres, que han demostrado su eficacia desde hace millones de años" (Página 189).
En esta obra hay una chica. Porque son muchas las mujeres que se pasean por las páginas de este libro, pero una sola la idealizada. La Laura de Petrarca no tiene un nombre propio, sino varios.
"Yo había creado una ficción, y el verdadero ser humano que había detrás de ese fantasma no terminaba de encajar en su molde" (Página 194)
Un médico que escribe novelas
Si uno cogiera el libro sin la sobrecubierta diseñada por la editorial, podría creer que quien firma la obra es un autor londinense. Sin embargo, este libro se terminó de escribir en El Escorial, y lo firma un licenciado en Medicina y especialista en Neurorradiología. Esto precisamente, cuadra con todo lo leído, incluso con los detalles más específicos como a qué velocidad se enfría un cadáver o cómo distinguir si un miembro ha sido amputado post mortem.
No es la primera obra publicada por Julio Castedo (quién compagina la literatura con su trabajo como radiólogo). Entre sus ensayos se encuentra Buen uso del lenguaje en los textos científicos. Se podría decir que también hace buen uso de los términos científicos en la escritura de una obra de ficción, un forense no podrá poner un pero.
Julio Castedo: Redención, editorial Planeta, 2015. 320 páginas. ISBN: 978-84-08-14465-6. Precio: 19 euros (papel), 9,99 euros (e-book).