La NBA ha confirmado que ha suspendido los partidos de la fase regular hasta el próximo 15 de diciembre, después de que los dueños de los equipos y el sindicato de jugadores hayan sido incapaces de llegar en las últimas semanas a un acuerdo sobre el nuevo convenio colectivo para desbloquear la situación de cierre patronal –lockout–, que dura ya casi cinco meses.
El conflicto, que comenzó el pasado 1 de julio, ha provocado el éxodo de las estrellas europeas a sus países, como es el caso del ruso Andrei Kirilenko (que ha fichado por el CSKA de Moscú), los españoles Rudy Fernández y Serge Ibaka (ambos en el Real Madrid), el francés Tony Parker (juega en el Asvel Villeurbanne, equipo del que es propietario) o el argentino Andrés Chapu Nocioni (Peñarol de Mar del Plata), entre otros. Ninguno de ellos, claro está, quiere perder el ritmo de competición.
La confirmación a los clubes de la suspensión de estas semanas, que provoca que no se disputen 324 encuentros (el 26 por ciento de la temporada), llegaba pocas horas antes de que algunos jugadores, entre los que se incluían Carmelo Anthony (New York Knicks) y Kevin Durant (Oklahoma City Thunder), presentaran una demanda colectiva antimonopolio contra la NBA en por lo menos dos estados, después de que el lunes se disolviera el sindicato de jugadores al no llegar a ningún acuerdo para desbloquear el lockout.
Los jugadores han elegido para que les represente en este nuevo conflicto al abogado David Boies, que ya representó a la Liga de Fútbol Americano (NFL) durante su conflicto laboral con los profesionales y que asegura que este cierre patronal de la NBA infringe las leyes antimonopolio al impedir que los jugadores tengan la posibilidad de trabajar.
De esta forma, Anthony y Chauncey Billups, compañero suyo en los Knicks, aparecen como denunciantes en la querella interpuesta en el Distrito Norte de California contra la NBA y los dueños de los 30 equipos. El caso fue asignado provisionalmente a la magistrada federal Donna M. Ryu en la ciudad de Oakland y, entre otros demandantes, enumera a Durant, pretendido por el Real Madrid, o el alero de Leon Powe (compañero de Marc Gasol en los Memphis Grizzlies), según informan los medios estadounidenses.
Además, el alero Anthony Tolliver (Minnesota Timberwolves), el base Ben Gordon (Detroit Pistons), el agente libre Caron Butler y Derrick Williams también aparecen como demandantes, en la otra querella interpuesta por los jugadores, que han empezado a no cobrar su salario.
Por su parte, la NBA, que esperaba esta medida ante los tribunales de los jugadores tras la disolución del sindicato, ya había presentado una demanda preventiva en Nueva York con el objetivo de demostrar que el cierre patronal es legal. Ahí se señala que, sin un sindicato que realice las negociaciones colectivas en nombre de los jugadores, se pueden declarar nulos los contratos garantizados que estos tienen.