El Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol (RFEF) ha acordado sancionar con un partido al jugador del Barcelona Gerard Piqué por acumulación de amonestaciones, tras ver la quinta tarjeta amarilla en el minuto 83 del partido contra el Rayo Vallecano el pasado martes (4-0).
Competición ha optado por sancionar al defensa del Barcelona de acuerdo a lo reflejado en el acta del colegiado Pérez Lasa, sin entrar de oficio y considerar la posible voluntariedad del jugador para forzar la quinta amarilla, que le permitirá cumplir el castigo en el duelo de este sábado contra el Levante y, por tanto, participar el día 10 en el clásico contra el Real Madrid en el Santiago Bernabéu.
Pérez Lasa señaló en el acta del encuentro Barcelona-Rayo, correspondiente a la decimoséptima jornada de Liga y adelantado por la participación de los azulgranas en el Mundial de Clubes, que Piqué fue amonestado en el minuto 83 "por retrasar la reanudación de un saque a favor de su equipo con ánimo de perder tiempo".
El Código Disciplinario de la RFEF establece a partir de esta temporada que el futbolista que provoque la quinta amonestación podrá ser sancionado, además de con un encuentro, con un partido adicional de suspensión y una multa accesoria de 600 euros.
El Comité de Competición actuó de oficio el pasado mes de agosto tras los incidentes entre el entrenador del Real Madrid, José Mourinho, y el segundo técnico del Barcelona, Tito Vilanova, al final del partido de vuelta de la Supercopa de España en el Camp Nou. Entonces sancionó con dos partidos a Mourinho y con uno a Vilanova, aunque el colegiado de aquel encuentro, Fernández Borbalán, no reflejó los hechos en el acta.