Dinamarca era la cenicienta del llamado grupo de la muerte. Nadie contaba con ella, ni siquiera para sumar un solo punto. Y, sin embargo, a las primeras de cambio, los de Morten Olsen han ganado (0-1) a Holanda, la finalista del Mundial, rompiendo todas las quinielas de la Eurocopa.
La Oranje, sin juego combinativo, se ha estrellado ante la seriedad de Dinamarca, que ha aprovechado a la perfección sus escasas ocasiones para llevarse tres puntos con los que nadie contaba. Holanda ya no tiene margen de maniobra ante Alemania y Portugal, con lo que ve muy comprometido su futuro en la competición.
Atasco naranja
Holanda se plantaba en Ucrania con la vitola de favorito después de ser finalista en el pasado Mundial de Suádafrica con un bloque similar al usado hoy. Pero desde el principio, Dinamarca ha conseguido sacar los defectos de la Oranje, un rival temible arriba, pero con poco fútbol en el centro del campo.
Ese ha sido el mayor defecto de Holanda, incapaz de mandar balones en condiciones a Van Persie. El centro del campo tosco de Van Bommel y De Jong no ha funcionado, como tampoco lo ha hecho Robben, muy individualista como acostumbra y realmente desesperante.
Sin ningún tipo de complejos y sin pasar demasiados apuros atrás, Dinamarca se adelantó en el marcador en la primera ocasión que cruzaba el centro del campo. Krohn-Dehli batió a Stekelenburg con la izquierda en el minuto 25. La sorpresa había saltado en el primer partido que se jugaba en Ucrania.
Sin plan B
Holanda, lejos de cambiar el guión, seguía actuando de la misma forma. Sólo tenía la opción de Robben, que una y otra vez se jugaba la acción en solitario con el mismo resultado: balones fuera. La mejor ocasión de todo el partido para Holanda fue fruto de un fallo del portero danés, que Robben recogió y lanzó al poste desde fuera del área.
En la segunda mitad, Holanda no llegó a encerrar a Dinamarca en su área, como era previsible con el potencial ofensivo del equipo naranja. La luz sólo la ponía Sneijder, el mejor de la Oranje, pero estuvo demasiado intermitente. En el tramo final, Holanda pudo empatar tras la salida de Huntelaar, pero, en un mano a mano, se topó con el inspirado Andersen.
Al final, pudo más el orden de Dinamarca y el trabajo de jugadores como Zimling que el talento de Van Persie, Robben o Sneijder. Holanda ha quedado en entredicho, sobre todo en la zona de creación. A partir de ahora se la jugará a cara o cruz ante Alemania y Portugal. La subcampeona del mundo está en serios apuros.
Ficha del partido
Holanda, 0: Maarten Stekelenburg; Van der Wiel (Kuyt, min.85), Heitinga, Vlaar, Jetro Willems; Van Bommel, Nigel de Jong (Van der Vaart, min.71), Robben, Wesley Sneijder; Ibrahim Afellay (Huntelaar, min.71) y Robin van Persie
Dinamarca, 1: Andersen; Jacobsen, Kjær, Agger, Simon Poulsen; Zimling, Kvist; Rommedahl (Mikkelsen, min.85), Eriksen (Schone, min,46), Krohn-Dehli; y Bendtner.
Gol: 0-1, min.24: Krohn-Dehli
Árbitro: Damir Skomina, de Eslovenia. Mostró cartulina amarilla a Van Bommel (min.67), Poulsen (min.78) y Kvist (min.81)
Incidencias: partido correspondiente al grupo B de la Europa de Polonia y Ucrania, disputado en el estadio Metalist Stadium de Járkov (Ucrania), ante unos 32.000 aficionados