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Alemania sigue implacable

La de Joachim Löw es la única selección que pasa a cuartos de final con pleno de victorias.

Lukas Podolski celebra su gol ante Dinamarca. | EFE

Tres victorias, nueve puntos, cinco goles a favor y sólo dos en contra. Así es Alemania. En el último partido del grupo B, los de Joachim Löw han derrotado a Dinamarca (1-2) en un partido que ha tenido historia. Cuando todo el mundo pensaba en el empate –tras los goles de Podolski y Krohn-Dehli– apareció, en el 80, el lateral Bender para sorprender a propios y extraños. Acompañó una contra hasta el final y el destino le dio la oportunidad de marcar su primer gol como internacional.

Sonaban los himnos en el Arena Lviv y se desataban los nervios. Dinamarca necesitaba la victoria ya que un empate sólo le valía si Portugal perdía ante Holanda. Con 90 minutos por delante, podía pasar de todo. Los alemanes, que tenían el pase a cuartos muy encarrilado, se quedaban fuera de la siguiente ronda si caían ante Dinamarca por dos goles o más y los lusos se llevaban los tres puntos ante los de Bert van Marwijk.

Podolski adelanta a los germanos

Comenzó el partido con un dominio total y abrumador de los alemanes. Las ocasiones se sucedían una tras otra y parecía mentira que el marcador no se hubiese movido tras los primeros diez minutos. Los daneses apenas habían inquietado a Neuer. A todo esto, llegó el gol de Holanda que clasificaba a los de Morten Olsen. Puede ser que por relajación o porque de tanto ir a la fuente, el cántaro se rompió. Fue Lukas Podolski quien iba a inaugurar el marcador. Thomas Müller metió un pase raso al primer palo que fue tocado por Mario Gómez en semifallo y Podolski, que llegaba sólo por el centro, la enganchó y perforó la portería de Andersen.

Krohn-Dehli devuelve la ilusión

Tras el gol de los alemanes, Dinamarca estaba fuera de la Eurocopa y necesitaba reaccionar. Comenzó a abrir el campo y a entrar por bandas. El gigantón Nicklas Bendtner esperaba los balones que le caían desde los costados. A pesar de que el dominio seguía siendo germano, el gol llegó como suele llegar en estos casos. Un balón colgado al área lo prolongó Bendtner para que Kronh-Dehli, libre de marca, pusiera las tablas en el marcador.

Tras el gol danés, los de Morten Olsen se echaron de nuvo hacia atrás y Alemania multiplicaba sus ocasiones de gol. Mario Gómez, en el 31; Podolski, en el 36; y Khedira, en el 40, pudieron poner por delante de nuevo a los suyos. El descanso llegó en el mejor momento para Dinamarca pero con Portugal y Holanda empatados, lo que la dejaba fuera del torneo.

Bender se estrena

Tras el descanso, Alemania salió más relajada y permitió a Dinamarca atacar un poco más. En el 50, Poulsen envió su disparo al poste en lo que pudo significar el 2-1. Los daneses y los germanos jugaban al trantrán, a pesar de que los de Morten Olsen estaban eliminados en ese momento.

Las prisas y los nervios llegaron en el 73, cuando Portugal remontó el partido a Holanda. Entonces Dinamarca intentó hacer los deberes a todo trapo pero las cosas en el fútbol no funcionan así. A diez minutos para el final, Bender acompañó una contra para acabar batiendo a Andersen y festejar, con una sonrisa de oreja a oreja, su primer gol como internacional. En cuartos de final, Alemania se las verá con Grecia, que ha acabado segunda en el grupo A.


Ficha técnica

Dinamarca, 1: Andersen; Jacobsen, Kjær, Agger, Simon Poulsen; Jacob Poulsen (Mikkelsen, m.82), Kvist; Zimling (Christian Poulsen, m.79), Eriksen, Krohn Dehli; y Bendtner
Alemania, 2: Neuer; Bender, Hummels, Badstuber, Lahm; Khedira, Schweinsteiger; Müller (Kroos, m.84), Özil, Podolski (Schürrle, m.64); y Gómez (Klose, m.74)

Goles: 0-1, m.19: Podolski; 1-1, m.25: Krohn-Dehli; 1-2, m.80: Bender
Arbitro: Velasco Carballo (España). Sin amonestados
Incidencias: Partido de la tercera jornada del grupo B de la Eurocopa 2012 disputado en Lviv ante unos 32.000 espectadores

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