El Laboral Kutxa abrió la segunda vuelta del Top 16 de la Euroliga con un trascendental triunfo, por 84-87, en la cancha del Anadolu Efes de Estambul que le mete en la pugna por la pelea del cuarto puesto para jugar los cuartos de final de la Euroliga.
La noche no fue redonda para un Baskonia de dos caras, contrapuesto entre el juego coral y acertado del primer tiempo y los minutos tenebrosos del tercer periodo que a punto estuvieron de costarle el partido.
La renta final de tres puntos no le sirve para enjuagar el average particular con el Anadolu Efes que venció por cinco en Vitoria. Así para hipotéticos empates a número de triunfos al final de esta fase los otomanos siempre figuraran por delante del Laboral Kutxa.
La noche no fue redonda para un Baskonia de dos caras, contrapuesto entre el juego coral y acertado del primer tiempo y los minutos tenebrosos del tercer periodo que a punto estuvieron de costarle el partido.
La renta final de tres puntos no le sirve para enjuagar el average particular con el Anadolu Efes que venció por cinco en Vitoria. Así para hipotéticos empates a número de triunfos al final de esta fase los otomanos siempre figuraran por delante del Laboral Kutxa.
El Unicaja de Málaga, por su parte, lo intentó por todos los medios pero salió derrotado en su visita al Olympiacos (77-72), por lo que queda virtualmente eliminado de la máxima competición continental tras presentar una única victoria después de ocho partidos.
El equipo de Joan Plaza fue mejor durante la primera parte y llegó a mandar en el marcador durante 22 minutos, dos más que su rival. Sin embargo, su nefasta estadística en el rebote ofensivo le acabó pasando factura ante un Olympiacos que celebró por todo lo alto su partido 500 en la Copa de Europa.
Para colmo, Spanoulis entró en los libros de historia al convertirse en el tercer máximo asistente de la competición.