El Real Madrid recupera la sonrisa tras la derrota en el Clásico después de arrollar este martes a un rival peligroso como el Unics Kazán ruso, al que ha vencido por 85-68 en un partido donde su intensidad defensiva, el acierto exterior y Walter Tavares fueron claves para desdibujar a la revelación de la Euroliga 2021-2022, en partido aplazado de la decimoctava jornada.
El conjunto madridista se tomó cumplida revancha de la derrota en la primera vuelta, donde sólo fue capaz de anotar 58 puntos, y afianza su primera posición en la clasificación de la Fase Regular con un balance de 17-3 después de un encuentro donde recuperó sus credenciales de toda la temporada.
Los de Pablo Laso maniataron a su rival, que apenas pudo mostrar las virtudes de su óptima campaña, sobre todo las defensivas. El equipo local sacó su mejor versión atacante, sobre todo desde el triple (14/31), y por dentro tuvo a un Tavares imparable (14 puntos y 11 rebotes). Sólo su relajación final impidió una victoria más abultada.
Y es que el Unics sólo pudo plantar cara en el inicio del duelo, cuando se agarró a sus dos Brown, Lorenzo y John, para empezar dominando y llevando el partido a su terreno, aunque el conjunto madridista supo aguantar también aferrado a su defensa y a la espera de que el tiro exterior afinase para hacer daño al entramado diseñado por Perasovic para impedir el juego en la 'pintura' donde los locales querían imponer a Tavares.
Sin embargo, el partido cambió de rumbo con la entrada de Sergi Llull por un Heurtel con el que Pablo Laso no parecía estar muy contento. El de Mahón afinó su muñeca y tres triples seguidos, uno sobre la bocina, firmaron un parcial de 9-0 para cerrar los diez primeros minutos por delante (21-14).
Al equipo ruso le costaba hacer puntos sin la presencia de Lorenzo Brown y su poderío defensivo se resquebrajaba por la presencia de Tavares y del bombardeo exterior madridista. El caboverdiano, con un 2+1, y Rudy Fernández, con un 3+1 y una penetración, abrieron la primera brecha interesante (32-21).
El diez veces campeón de Europa mejoraba con la intensidad defensiva que aportaba también Taylor, pero el Unics tuvo entonces su último amago de resistencia, liderado por Hezonja, que con dos triples, un espectacular alley-oop de espaldas y una canasta, mantuvo a los suyos (35-28).
Más de 30 puntos de diferencia
Pero sería por poco tiempo porque el Real Madrid, pese a sus ocho pérdidas, aceleró otra vez gracias a su defensa, su apabullante dominio en el rebote (40-21 al final), su acierto desde el triple (9/18 al descanso) y Tavares, y se fue a vestuarios con una cómoda renta (47-31).
En la reanudación, el conjunto madrileño cercenó rápidamente cualquier atisbo de reacción rusa. Mantuvo su intensidad defensiva y encontró el acierto de Guerschon Yabusele, autor de tres triples, y la mejoría de un Heurtel más entonado. Tavares siguió a lo suyo y pese a los esfuerzos de Jekiri y John Brown la diferencia se llegó a estirar por encima de los 30 puntos (69-38).
Y ahí ya dio por 'inalizado el encuentro el Real Madrid, que sabedor de lo exigente de un calendario sin descanso, aflojó el acelerador. Laso lo aprovechó para aumentar el rodaje de Randolph y Thompkins y el Unics para firmar un parcial de 11-23 y maquillar su derrota.