El Atlético de Madrid está en una situación más que complicada en la Copa de Europa y todo ello en gran medida por su inoperancia de cara a portería. Sólo un gol en tres partidos atesora el cuadro de Simeone y lo peor es que ese único gol no le ha servido ni siquiera para sumar una sola victoria. Dos puntos de nueve es su balance.
La delantera del Atlético está seca. Griezmann ha sido el único en marcar en Europa y lo ha hecho desde el punto de penalti ante el Chelsea en el Wanda Metropolitano. El gol no sirvió para nada ya que los ingleses remontaron y se llevaron el partido. En Roma, el portero local amargó la tarde al Atlético y Saúl se topó con el palo cuando tenía el 0-1 en el bolsillo con la portería vacía. Otra ocasión del centrocampista ante el Chelsea pudo suponer el 2-0, pero tampoco se materializó. En el duelo frente al Qarabag hubo ocasiones aunque ninguna de ellas solucionó el problema de falta de gol que tiene el Atlético.
Griezmann está a un nivel muy por debajo del cartel que tiene en su espalda y que le hace ser uno de los mejores jugadores del mundo. Gameiro y Torres apenas han contado para Simeone y la pareja Vietto-Correa pese a tener minutos no son delanteros referencia. Falta un killer y hasta enero no podrán contar con él. Se llama Diego Costa.
En Europa las cosas van muy mal, pero en Liga tampoco van sobrados de goles. Empataron a cero en Mestalla y Butarque ante Valencia y Leganés mientras que ante Barcelona, Sevilla, Athletic, Málaga, Las Palmas y Girona marcaron uno, dos, dos, uno, cinco y dos goles, respectivamente. Trece goles a favor y cinco en contra con la pólvora de su segunda línea solucionando los problemas de la delantera. En los últimos tres partidos (Qarabag, Leganés y Chelsea), un sólo gol y de penalti.
Gameiro, Vietto y Torres no han marcado ni un sólo gol entre Liga y Champions. Griezmann, por su parte acumula tres. Carrasco y Correa salvan el orgullo de los atacantes con tres goles cada uno en la competición doméstica. Sin Diego Costa, presente en la grada, el Atlético zozobra en ataque y por desgracia para Simeone sólo queda resistir hasta el mercado invernal. Aguantar o que alguno de los líderes del ataque o lo que es lo mismo, Griezmann, suban el nivel de responsabilidad y de liderazgo.