(Libertad Digital) El Celtic ha sucumbido al fútbol con el que está creciendo este Barça, que se permitió el lujo de prescindir de Ronaldinho cuando el partido iba 1-1, y después de que se le hubiese puesto cuesta arriba con el empuje local. Hasta que entonces surgió Giuly.
En la primera mitad, el equipo de Frank Rijkaard fue muy generoso tras darle un baño de fútbol, de toque, de colocación y de técnica al músculo del Celtic, siempre solícito para intimidar con patadas, pero incapaz de dar tres pases seguidos. Así, el equipo de Martin O´Neill tiró por el callejón oscuro cuando en los tres primeros minutos dos jugadores del Celtic se habían hecho merecedores de la roja directa por sendas entradas despiadadas contra Márquez y Gio. Pero sólo vio una amarilla Hartson, pues Thompson salió indemne de su exceso, como también ocurriría minutos más tarde cuando le enseñó la plancha a Gerard.
El Barcelona dejó en el banquillo a Larsson y apostó por la sobriedad de Gerard en el centro del campo, mientras que envió a la banda izquierda del ataque a Eto´o y Ronaldinho pivotó como delantero centro. A los pocos minutos se vio que, al margen de toda la escenificación de cánticos y ambientes que se gestan en el Celtic Park, el equipo católico no tiene nivel para tutear con el balón al conjunto azulgrana, plagado de jugadores a los que no les tiembla la pelota en los pies. Con el dominio del Barça, además de sumar minutos de posesión, Marshall empezó a tener problemas en su meta. La primera de ellas, una cesión defectuosa a la que Belletti no llegó a conectar. Ronaldinho, en el minuto 8, lanzó fuera un balón franco. Tres minutos después, Marshall desvió un lanzamiento contundente de Gio y en el 16 un remate de cabeza de Ronaldinho salió ligeramente desviado.
El Barcelona necesitaba marcar un gol para dar sentido al dominio insultante y éste llegó en el minuto 22 gracias a un disparo cruzado de Deco, a pase de Ronaldinho en profundidad. En plena exhibición, un centro de Giuly no tuvo la concreción en gol ni de Xavi ni Ronaldinho. El Celtic tuvo alguna opción y ésta llegó a balón parado, cuando la afición y el equipo escocés suele crecerse. Pero en estas acciones, el Barcelona, bajo de estatura respecto a sus rivales, anduvo certero. En la recta final de la primera parte, la generosidad barcelonista fue en aumento, ya que falló lo indecible ante la meta de Marshall, especialmente una acción de Giuly, que tras superar al meta del Celtic, erró en el lanzamiento cuando Baldé se le cruzó. Dos minutos antes, en el 43, el extremo francés también falló en un disparo franco. Thompson, en el tiempo de añadido, tuvo en sus botas echar por tierra todo el trabajo y dominio barcelonista, pero su largo trote por el campo acabó con un disparo poco preciso, tras sortear a tres barcelonistas.
En la segunda parte, el Celtic entró en el partido, concretamente después de que Ronaldinho fallase un penalti, por falta a Giuly. Llegó el gol de Sutton, que había entrado minutos antes, quien ganó la posición a un despistado Belletti. Tanto perdonó el Barcelona, que tras el tanto de Sutton el Celtic creyó que iba a ganar el partido. Fue entonces cuando Rijkaard dio la campanada, dando entrada a Oleguer, Larsson e Iniesta, por Márquez, Ronaldinho y Eto´o. El acierto fue rotundo. Giuly marcó el gol del desempate tras rebotar el balón en el pecho de un rival y Larsson aprovechó una cesión de Thompson para redondear una gran noche de fútbol en Glasgow.
En la primera mitad, el equipo de Frank Rijkaard fue muy generoso tras darle un baño de fútbol, de toque, de colocación y de técnica al músculo del Celtic, siempre solícito para intimidar con patadas, pero incapaz de dar tres pases seguidos. Así, el equipo de Martin O´Neill tiró por el callejón oscuro cuando en los tres primeros minutos dos jugadores del Celtic se habían hecho merecedores de la roja directa por sendas entradas despiadadas contra Márquez y Gio. Pero sólo vio una amarilla Hartson, pues Thompson salió indemne de su exceso, como también ocurriría minutos más tarde cuando le enseñó la plancha a Gerard.
El Barcelona dejó en el banquillo a Larsson y apostó por la sobriedad de Gerard en el centro del campo, mientras que envió a la banda izquierda del ataque a Eto´o y Ronaldinho pivotó como delantero centro. A los pocos minutos se vio que, al margen de toda la escenificación de cánticos y ambientes que se gestan en el Celtic Park, el equipo católico no tiene nivel para tutear con el balón al conjunto azulgrana, plagado de jugadores a los que no les tiembla la pelota en los pies. Con el dominio del Barça, además de sumar minutos de posesión, Marshall empezó a tener problemas en su meta. La primera de ellas, una cesión defectuosa a la que Belletti no llegó a conectar. Ronaldinho, en el minuto 8, lanzó fuera un balón franco. Tres minutos después, Marshall desvió un lanzamiento contundente de Gio y en el 16 un remate de cabeza de Ronaldinho salió ligeramente desviado.
El Barcelona necesitaba marcar un gol para dar sentido al dominio insultante y éste llegó en el minuto 22 gracias a un disparo cruzado de Deco, a pase de Ronaldinho en profundidad. En plena exhibición, un centro de Giuly no tuvo la concreción en gol ni de Xavi ni Ronaldinho. El Celtic tuvo alguna opción y ésta llegó a balón parado, cuando la afición y el equipo escocés suele crecerse. Pero en estas acciones, el Barcelona, bajo de estatura respecto a sus rivales, anduvo certero. En la recta final de la primera parte, la generosidad barcelonista fue en aumento, ya que falló lo indecible ante la meta de Marshall, especialmente una acción de Giuly, que tras superar al meta del Celtic, erró en el lanzamiento cuando Baldé se le cruzó. Dos minutos antes, en el 43, el extremo francés también falló en un disparo franco. Thompson, en el tiempo de añadido, tuvo en sus botas echar por tierra todo el trabajo y dominio barcelonista, pero su largo trote por el campo acabó con un disparo poco preciso, tras sortear a tres barcelonistas.
En la segunda parte, el Celtic entró en el partido, concretamente después de que Ronaldinho fallase un penalti, por falta a Giuly. Llegó el gol de Sutton, que había entrado minutos antes, quien ganó la posición a un despistado Belletti. Tanto perdonó el Barcelona, que tras el tanto de Sutton el Celtic creyó que iba a ganar el partido. Fue entonces cuando Rijkaard dio la campanada, dando entrada a Oleguer, Larsson e Iniesta, por Márquez, Ronaldinho y Eto´o. El acierto fue rotundo. Giuly marcó el gol del desempate tras rebotar el balón en el pecho de un rival y Larsson aprovechó una cesión de Thompson para redondear una gran noche de fútbol en Glasgow.
Ficha técnica del partido
Celtic de Glasgow, 1: Mashall; Agathe, Varga, Baldé, McNamara (Sylla, m.80); Lennon, Juninho (Sutton, m.46), Petrov, Thompson; Hartson (Valgaeren, m.63) y Camara
Barcelona, 3: Valdés; Belletti, Puyol, Márquez (Oleguer, m.62), Van Bronkhorst; Xavi, Gerard, Deco; Giuly, Eto´o (Iniesta, m.74) y Ronaldinho (Larsson, m.62)
Goles: 0-1, min.20: Deco. 1-1, min.59: Sutton. 1-2, min.78: Giuly. 1-3, min.81: Larsson
Árbitro: Markus Merk (Alemania). Mostró cartulina amarilla a Hartson (min.2), Juninho (min.28), Márquez (min.36) y McNamara (min.55)
Incidencias: Partido de la primera jornada del grupo F de la Liga de Campeones disputado en el Celtic Park de Glasgow ante algo más de 60.000 espectadores que llenaron por completo el estadio escocés. El partido empezó con algo más de media hora de retraso
Barcelona, 3: Valdés; Belletti, Puyol, Márquez (Oleguer, m.62), Van Bronkhorst; Xavi, Gerard, Deco; Giuly, Eto´o (Iniesta, m.74) y Ronaldinho (Larsson, m.62)
Goles: 0-1, min.20: Deco. 1-1, min.59: Sutton. 1-2, min.78: Giuly. 1-3, min.81: Larsson
Árbitro: Markus Merk (Alemania). Mostró cartulina amarilla a Hartson (min.2), Juninho (min.28), Márquez (min.36) y McNamara (min.55)
Incidencias: Partido de la primera jornada del grupo F de la Liga de Campeones disputado en el Celtic Park de Glasgow ante algo más de 60.000 espectadores que llenaron por completo el estadio escocés. El partido empezó con algo más de media hora de retraso