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Final feliz del secuestro de la hermanastra del presidente de Boca Juniors

La liberación de la hija menor del poderoso empresario Franco Macri y hermanastra del presidente del Boca Juniors, Florencia Macri, ha puesto fin a un secuestro que conmocionó a la sociedad argentina tanto como el caso que hace poco más de un año involucró al hermano del futbolista Juan Román Riquelme.

L D (EFE) Florencia Macri, de 19 años, aparecía sana y salva la pasada madrugada en la ciudad de Moreno, a unos 45 kilómetros al oeste de Buenos Aires, después de que su familia pagara a los captores un rescate de entre 700.000 y 800.000 dólares, según fuentes policiales. La hija del propietario de SOCMA, uno de los consorcios más importantes del país, pasó seis días en cautiverio y su padre negoció con los secuestradores sin hacer ninguna denuncia, por lo que los investigadores del caso actuaron de oficio.

El hermanastro de la joven y presidente del club de fútbol Boca Juniors, Mauricio Macri, ha dicho a los periodistas que Florencia estaba "muy bien" y agregaba que el tiempo que pasó en poder de los delincuentes "no fue muy largo para lo se está viviendo en Argentina". De este modo, alude al constante incremento de la delincuencia y de los secuestros de ricos y famosos, que en los últimos meses se han convertido en una pesadilla en medio de la grave crisis económica y social que vive este país sudamericano.

En abril del año pasado, el futbolista del Barcelona Juan Román Riquelme pagó alrededor de 160.000 dólares por la liberación de uno de sus hermanos, de 16 años, que pasó dos días secuestrado. Otro caso que conmovió a los argentinos fue el del padre del famoso actor de cine y televisión Pablo Echarri, quien estuvo cautivo una semana y fue liberado tras la intervención de la policía en octubre último.

Mauricio Macri, quien en agosto de 1991 también fue víctima de un secuestro, asegura que "no hay detenidos" por el hecho que ha involucrado a su hermanastra y ha sostenido que por su liberación "se pagó mucho menos de lo que dicen los diarios". Los medios de comunicación habían señalado que los delincuentes exigían 1,5 millón de dólares y el presidente del Boca se negaba a dar precisiones sobre el monto del rescate "para no incentivar este tipo de delitos". Ha explicado que "se hizo la denuncia a la policía" y ha dicho que Florencia no pudo dar muchos detalles sobre sus secuestradores porque en todo momento permaneció "con los ojos tapados".

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