El Manchester City sufrió este jueves más de lo esperado para superar en casa al Sunderland (3-2), en un partido que sentenció el veterano centrocampista Frank Lampard con un tanto dos minutos después de entrar al terreno de juego.
El legendario mediocampista, que permanecerá en el conjunto del norte de Inglaterra hasta final de temporada, salvó al City en un choque en el que el Sunderland llegó a remontar dos goles de desventaja en la segunda mitad.
Rotó ligeramente el equipo el técnico citizen, el chileno Manuel Pellegrini, quien dio entrada en el once al guardameta argentino Willy Caballero y al delantero montenegrino Stevan Jovetic, en lugar de Joe Hart y James Milner, respectivamente.
Después de varios partidos sin jugar con un delantero centro puro, el ingeniero recuperó al goleador Jovetic, y su presencia se notó en el ataque, con un gol y una asistencia. Tras cuarenta y cinco minutos sin demasiadas ocasiones, la segunda parte fue eléctrica, con cinco goles, cuatro de ellos en apenas ocho minutos.
El marfileño Yaya Touré, quien se marcha el próximo 5 de enero a la Copa de África con la selección de los elefantes, adelantó a los suyos a los 56 minutos de juego con un misil desde fuera del área que se coló por la escuadra de la meta defendida por el rumano Costel Pantilimon.
Respiraban los aficionados del City, sabiendo que el encuentro de era una ocasión vital para intentar recortar puntos con un Chelsea que visitaba el siempre complicado campo de White Hart Lane pare medirse al Tottenham. Nueve minutos después del obús de Touré llegó el segundo gol local, obra de Jovetic, quien, de tacón desde el área pequeña, dobló la ventaja de los suyos.
Sin embargo, 120 segundos después del tanto del antiguo jugador del Fiorentina llegó el descuento del Sunderland, obra de Jack Rodwell. El internacional inglés, marginado en su paso por el Manchester City, remató de cabeza un saque de esquina y superó a un Willy Caballero que ni se movió de la línea de gol. Los black cats del uruguayo Gustavo Poyet culminaron la remontada tres minutos después, con un tanto de penalti de Adam Johnson tras una falta desde dentro del área del argentino Pablo Zabaleta.
El conjunto del noreste de Inglaterra, con fama de "matagigantes" en el Reino Unido, parecía estar a punto de arañar dos puntos al todopoderoso Manchester City, que ya se dejó un empate en casa en la última fecha frente al Burnley (2-2).
Sin embargo, Frank Lampard, el futbolista de las grandes citas, subió el definitivo 3-2 en el minuto 73, con un remate desde el punto de penalti tras un centro desde la izquierda de Gael Clichy. La leyenda blue daba el triunfo a un City que con este triunfo, iguala a puntos al Chelsea, que este jueves visita a sus vecinos del Tottenham Hotspur, en el partido que cierra la apasionante jornada de Año Nuevo de la "Premier League".
Derrota de un Chelsea irreconocible
En el otro gran partido del día, el Tottenham no tuvo piedad con un Chelsea irreconocible (5-3) y lo goleó en el último partido de la vigésima jornada de la liga inglesa, un encuentro en el que José Mourinho, sufrió su peor derrota desde su llegada a la Premier League.
Con esta derrota, el Chelsea comparte ahora el liderato con el Manchester City, con el que iguala en todo (ganados, empatados, perdidos, goles a favor y goles en contra). Quince minutos brillantes le bastaron a un Tottenham excelso para igualar y remontar el partido de mano de un genial Harry Kane, autor de dos tantos hoy y una asistencia y nombrado Jugador del partido.
Adelantó Diego Costa a los blues pasado el cuarto de hora de juego después de empujar a la red un centro-chut del brasileño Oscar, en un tanto que protestó la zaga spur por posible fuera de juego del ariete. Sin embargo, diez minutos después, el hombre de moda en el club del norte de la capital británica, Harry Kane, igualó para los suyos con un disparo a pase del defensa Danny Rose.
El lateral, autor de una asistencia en el primer gol, marcó el segundo del Tottenham a falta un minuto para el descanso, tras una buena triangulación entre Christian Eriksen y Nacer Chadli. Con la defensa de los blues adelantada, un gran pase interior del danés lo aprovechó el belga para plantarse solo ante la meta de Thibaut Courtois, pero su disparo lo rechazó el palo. Sin embargo, Rose, como el mejor de los delanteros, empujó al esférico a la red desde el punto de penalti.
Con los jugadores y aficionados mirando el reloj para enfilar el el descanso, llegó el tercer tanto local, obra de Andros Townsend tras un penalti de Gary Cahill sobre Harry Kane. Townsend subió el 3-1 al marcador con un gran lanzamiento desde los once metros que se coló por el palo izquierdo del antiguo guardameta del Atlético de Madrid.
En los segundos 45 minutos se vieron cuatro goles más: dos de cada equipo, ante la frustración de un José Mourinho que no dejaba de protestar cada decisión del árbitro. A los siete minutos de la reanudación, de una ocasión de Eden Hazad se pasó al cuarto tanto local: Chadli cedió a Kane, quien protegió el balón ante el acoso de Nemanja Matic, y definió a la perfección al palo largo de Courtois.
En el 61, un error del argentino Federico Fazio en la salida lo aprovechó Eden Hazard para, después de un uno-dos con Cesc Fàbregas, quien sumó su decimoquinta asistencia esta temporada, reducir diferencias con los locales.
Nacer Chadli también se sumó a la fiesta y anotó el quinto tanto del Tottenham en el minuto 77 después de recibir un pase de Kane y soltar desde la frontal un gran tiro que tocó en John Terry y descolocó a Courtois. El propio Terry anotó el tercero de los blues y el octavo del apasionante choque, un tanto que evita que el Manchester City, que hoy ganó con sufrimiento al Sunderland (3-2), se coloque como líder de la "Premier League".