El horno no está para bollos en el Getafe, que lleva ya siete derrotas consecutivas y de ver cómo ha pasado a complicarse la existencia. Hace apenas un mes y medio, todo era miel sobre hojuelas en el Coliseum Alfonso Pérez: el Geta venía de cosechar tres victorias consecutivas y, después de 20 jornadas disputadas, el equipo marchaba décimo en la clasificación con 26 puntos, a siete de la sexta plaza que marcaba el Eibar.
Ahora, siete jornadas después, el conjunto de Fran Escribá continúa con esos mismos 26 puntos. Granada (3-2), Athletic de Bilbao (0-1), Málaga (3-0), Atlético de Madrid (0-1), Levante (3-0), Celta (0-1) y ahora Las Palmas (4-0) son los verdugos del Getafe, que, además de no haber sumado punto alguno, presenta un pobre balance de sólo dos goles a favor por 16 en contra en estas últimas siete fechas.
Siete derrotas consecutivas que han llevado al equipo del sur de la Comunidad de Madrid a pensar en la salvación. Está sólo dos puntos por encima de los puestos de descenso, en los que puede acabar al final de esta jornada si el Sporting de Gijón suma los tres puntos ante el Granada en el Nuevo Los Cármenes.
No es de extrañar, pues, la reacción de los futbolistas azulones, y menos aún en caliente. Es el caso de Mehdi Lacen, que esta noche jugó los 90 minutos en el Estadio de Gran Canaria. Al centrocampista le preguntaban por la situación del equipo, y el internacional argelino no se mordió la lengua: "Somos una auténtica mierda como equipo. Si seguimos así nos vamos a Segunda. Hay que decir las cosas como son".
Hasta ahora la cabeza de Fran Escribá, uno de los entrenadores revelación en la primera mitad de la Liga, no corría peligro. Pero lo cierto es que con esta nueva situación, el preparador valenciano ya puede empezar a echarse a temblar.