La Liga de Naciones: la última pamplina de la UEFA para sacar dinero

Nuevo lío a la vista. La máxima autoridad del fútbol europeo ha comenzado con los preparativos para una nueva brillante idea: la Liga de Naciones. Un nuevo torneo que servirá para emitir algunos billetes para la Eurocopa de 2020 y que reducirá el número de amistosos durante el año.

Dicha competición dará su pistoletazo de salida en septiembre de 2018, una vez termine la clasificación para el mundial de Rusia 2018. El Comité Ejecutivo ha ultimado el reglamento con la intención de mejorar el prestigio del fútbol de selecciones.

El formato contará con 55 selecciones, que se repartirán en cuatro divisiones, siendo A, B, C y D. Se disputarán seis jornadas con dobles partidos en septiembre y octubre del próximo curso. La forma de repartirse será: las ligas A y B contarán con cuatro grupos de tres equipos cada uno; la C con un grupo de tres selecciones y tres de cuatro; y la D, cuatro grupos de cuatro selecciones.

El campeonato se disputará entre las selecciones que queden primeras en sus grupos de la Liga A en junio de 2019. El formato será de eliminatorias, con dos semifinales y una final. Su sede tendrá que decidirse una vez se conozcan los finalistas y será a consenso del Comité Ejecutivo.

La UEFA también ha ideado un sistema de descensos: los últimos de cada grupo descenderán para el próximo torneo de 2020. Así pues, los últimos de cada grupo perderán la categoría y los primeros promocionarán.

El sorteo será el 24 de enero de 2018 y se revelará también el trofeo. En lo que se refiere a los billetes para la Eurocopa, el organismo explicó que cada una de las Ligas –A, B, C y D–tendrán cuatro plazas, una para los ganadores de cada grupo, siendo el total 16 selecciones las que optan a ese pase. Si alguno contase previamente con una plaza, su puesto pasaría para el siguiente mejor clasificado.