Fue comprado al Girondins de Burdeos por 45 millones y jugó en una única temporada un total de 1067 minutos. El fichaje de Malcom por el Barcelona no fue lo que esperaba la directiva y acabó siendo vendido por 40 millones al Zenir de San Petersburgo. Ahora, desde Rusia y no con amor precisamente, ha mandado un dardo a su exequipo.
Malcom analizó de manera crítica cómo le pudo afectar el tiempo de entrenamiento diario que, según él, el Barcelona tenía con Ernesto Valverde como técnico. Fue contundente en declaraciones a la Cadena Ser.
"Aquí hacemos soble sesión de trabajo. En el Barcelona entrenábamos 40 o 50 minutos y por eso tal vez me lesioné", comentó en la entrevista el atacante carioca.
Malcom también habló del líder del Barcelona, Messi, que según su versión no es ni mucho menos el que toma las decisiones: "Leo no es el presidente, es el capitán que ayuda al equipo. Hablaba primero con nosotros y luego iba a hablar con el presidente o el entrenador. Messi es increíble. En el Barça jugué con los mejores y aprendí mucho".
Cuestionado por la posibilidad de ver a Neymar de nuevo en la Ciudad Condal, Malcom cree que su compatriota, si vuelve, volverá a triunfar: "No sé si volverá. Si lo hace será como la primera vez que lo hizo cuando llegó a este club."