Un gol de Stuart Armstrong en la segunda mitad frustró la victoria de un Arsenal que pincha por segunda vez en esta Premier League (1-1) y que ya solo tiene dos puntos de ventaja en la primera posición de la tabla.
Los de Mikel Arteta se adelantaron por medio de Granit Xhaka, con un golazo del suizo de primeras, pero, pese a las múltiples oportunidades de Gabriel Jesús para sentenciar, fue el Southampton el que sacó oro del St. Mary's con un empate que acerca al City al liderato.
Olían los 'Gunners' ya el aliento del Manchester City, que derrotó este sábado al Brighton y que iniciaba el domingo a un solo punto de distancia del liderato, bien agarrado desde hace semanas por el Arsenal. Era una ocasión para testar el juego bajo presión de los de Mikel Arteta, que llevan once jornadas excepcionales, con el único tropiezo de Old Trafford, y que están demostrando que, aunque nadie contara con ellos antes del inicio de esta Premier League, su candidatura al título puede estar lejos de ser una quimera.
Solo hubo que esperar once minutos, cuando Ben White, cómodo en la posición de lateral, cuajó un centro a media altura que Granit Xhaka, otra vez con la diestra como ante el PSV Eindhoven, mandó de primeras a la red. Golazo para el mediocampista suizo e impulso de confianza para el Arsenal, que pudo matar sin dificultades el encuentro antes del descanso.
Lo tenía en la mano el Arsenal, pero el delantero ‘gunner’ no tenía el día. El brasileño erró otro mano a mano, por falta de punta de velocidad, minutos antes de que el Southampton lograra el empate en una de sus escasas aproximaciones a la meta de Ramsdale.
Una brillante combinación en transición que llevó a Elyounoussi hasta la frontal y a filtrar la pelota entre los centrales para que Stuart Armstrong cruzara ante Ramsdale.
Pese al arreón final de los 'Gunners', aguantaron los 'Saints', que suman doce puntos en la tabla, alejándose poco a poco del descenso, mientras que los hombres de Arteta siguen líderes, pero ya solo con dos puntos de ventaja respecto al City.
Callum Wilson y el paraguayo Miguel Almirón, beneficiados de los errores del meta francés Hugo Lloris, apuntillaron al Tottenham en Londres y agigantaron el panorama del Newcastle (1-2) metido de lleno ya en la pelea por las plazas de Liga de Campeones de la Premier.
Van a más las 'urracas', en racha y en plena inspiración alentado por la buena dinámica de las últimas semanas. Todo lo contrario que su rival. El cuadro de Antonio Conte ha dimitido jornadas atrás de la lucha por el liderato y ahora ve peligrar un lugar entre los cuatro primeros de la clasificación, en donde estaban instalados.
El conjunto de Eddie Howe había resistido el empuje local inicial, pero en cuanto pudo sentenció. Primero cuando un centro largo de Fabian Schar llegó a Callum Wilson que se topó con el francés Hugo Lloris que salió de mala manera y Wilson se quedó con el balón y marcó a puerta vacía.
Había pasado media hora y los visitantes tenían el partido en ventaja que ampliaron nueve minutos después. Un mal saque de Lloris fue interceptado por Sean Longstaff que centró la pelota a Miguel Almirón y este se deshizo de Ryan Sessegnon primero, y de Clement Lenglet después, se adentró en el área y la cruzó ante la salida del portero francés.
Contracorriente emergió otra vez el Tottenham que aprovechó una acción a balón parado para acortar las diferencias. Fue en un saque de esquina que peinó Lenglet al segundo palo donde Harry Kane no falló.
Se animó el Tottenham que buscó el empate pero el Newcastle no se desordenó. Mantuvo el tipo y marcó el ritmo que le interesaba, lejos de la continuidad que buscaba su rival. No tuvo ocasiones claras y no las hubo hasta el final. Las urracas resistieron en medio de un encuentro que decayó con el paso de los minutos mientras el conjunto de Antonio Conte caía por segundo partido seguido.
El oportunismo y el alto nivel ofrecido especialmente en el arranque del partido reanimaron al Aston Villa, que derrotó con una goleada al Brentford (4-0) en el primer encuentro de los 'villanos' tras el cese de Steven Gerrard.
El primer triunfo del conjunto de Aaron Danks, técnico interino del equipo de Villa Park, fue contundente. Se reencontró con la victoria después de cuatro partidos sin ganar.
Mucho tuvo que ver en el éxito del cuadro de Birmingham el talante con el que afrontó la visita del equipo del danés Thomas Frank, porque al cuarto de hora los locales ya ganaban por 3-0.
Leon Bailey inauguró el marcador a los dos minutos tras recibir un balón de David Luiz. Y cinco después Danny Ings abrió su cuenta después de un centro del jamaicano y superó de nuevo al español David Raya. En el 14, una falta cometida por Kristoffer Ajer dentro del área fue sancionada como un penalti que transformó Ings.
El choque quedó resuelto. El ritmo bajó. El Brentford careció de capacidad de reacción. De hecho, el Aston Villa completó la goleada con un tanto de Ollie Watkins a la hora de juego.
El Aston Villa huye del descenso. Se queda a tres puntos del Leeds, que está anclado ahora en la antepenúltima plaza.
El Leicester alargó su buena línea con una goleada en el Molineux Stadium a costa del Wolverhampton (0-4), en pleno declive y anclado en la zona de descenso de la Premier, que este fin de semana alcanza la duodécima jornada.
Mal pinta el panorama del conjunto de Steve Davis que cosechó de mala manera su segunda derrota seguida. Hizo aguas el Wolverhampton incapaz de contarrestar el orden de un rival que aprovechó sus ocasiones para agrandar su paulatina mejoría.
El segundo triunfo seguido de los foxes se fraguó a los ocho minutos con el gol del belga Youri Tielemans. Después, en el 19, fue Harvey Barnes el que volvió a batir al portugués Jose Sa a pase de Kiernan Dewsbury Hall.
No aprovechó el descanso para cambiar la dinámica el cuadro local que a la hora de partido encajó el tercero firmado por James Maddison a pase de Jamie Vardy que firmó el cuarto a diez del final tras recibir un balón de Timoth Castagne.
Tres encuentros sin perder lleva el Leicester, que escapa de la zona baja. Dos puntos le distancian del descenso en el que está inmerso el Wolverhampton.
Una remontada del Fulham en Elland Road acentuó la crisis del Leeds United, que no pudo evitar su cuarta derrota seguida (2-3) y cae a la zona de descenso de la Premier, que este fin de semana alcanza la duodécima jornada.
No levanta cabeza el conjunto de Jesse Marsch. Los reveses ante el Crystal Palace, Arsenal, Leicester y este ante el Fulham profundizan el bache del cuadro de Elland Road, antepenúltimo de la clasificación y con la permanencia a dos puntos.
No le dio para mantener el tipo al Leeds a pesar de tener encarrilado el marcador. Así ocurrió cuando el español Rodrigo, su jugador más fiable en ataque en este curso, puso por delante a los locales. La ventaja solo duró seis minutos porque el serbio Alexandar Mitrovic equilibró la situación tras recibir un balón del brasileño Andreas Pereira.
Fue Pereira el motor visitante. El hombre que mantiene en buena línea al conjunto de Marco Silva, en la parte alta, acomodado. De sus botas nació el segundo tanto visitante firmado por Bobby Reid.
Intentó reaccionar el Leeds, pero su ímpetu no tuvo premio. Agotó sus opciones cuando el brasileño Willian llevó a la red el balón tras un pase de Harrison Reed. Insistió el Leeds, pero solo le dio para acortar distancia. Lo hizo en el tiempo añadido por medio del neerlandés Crysencio Summerville, pero careció de minutos para conseguir evitar un nuevo revés.