Karim Benzema vivió este viernes una noche para el recuerdo en Lyon, donde ofreció su Balón de Oro a la afición del Olympique, el club en el que se formó y del que salió para fichar por el Real Madrid, hace ya 13 años.
El delantero está sufriendo esta temporada varias molestias musculares que le han impedido jugar con regularidad en el conjunto de Carlo Ancelotti, y este viernes habló del asunto en los prolegómenos del partido de la Ligue 1 francesa entre el Lyon y el Niza (1-1).
"Tuve algunas pequeñas molestias, nada grave", dijo el delantero, que cree que estará listo para el debut de Francia en el Mundial de Qatar, el próximo 22 de noviembre contra Australia. "Todavía hay tiempo de aquí al día 22. Estaré en buena forma, preparado física y mentalmente", ha apuntado Benzema.
El delantero madridista cumplirá 35 años el 19 de diciembre, justo el día después de la final del Mundial, y reconoce que conquistar el trofeo con los bleus "sería uno de los mejores regalos de cumpleaños para mí". "Cada encuentro será una final. Tenemos un grupo muy bueno, vamos a ir partido tras partido", ha dicho Benzema, cuya selección se medirá a Australia (22), Dinamarca (26) y Túnez (30) en la primera fase del campeonato.