Menú

Copa del Rey

Un histórico Osasuna se carga al Athletic en una prórroga de locura y se mete en la final de Copa (1-1)

El golazo de volea de Pablo Ibáñez en el minuto 116 clasifica al equipo navarro para una final copera 18 años después.

El golazo de volea de Pablo Ibáñez en el minuto 116 clasifica al equipo navarro para una final copera 18 años después.
Los jugadores de Osasuna celebran el gol de Ibáñez | EFE

Este Osasuna de Jagoba Arrasate ya es historia rojilla. Los pamplonicas se meten en la final de Copa del Rey por segunda vez en su historia y lucharán el próximo 6 de mayo en Sevilla por su primer título. El golazo de Pablo Ibáñez en el minuto 116 evitó la tanda de penaltis tras un ejercicio de supervivencia en San Mamés. Nico Williams falló ocasiones de todos los colores y el Athletic Club lo pagó.

La noche empezaba con incidentes en los aledaños del feudo rojiblanco. Lamentable lo sucedido en Bilbao: aficionados y ultras del Athletic bloquearon el autobús de Osasuna cuando intentaba entrar en San Mamés. El partido se tuvo que retrasar diez minutos por lo ocurrido, pero no fue suficiente para frenar a los navarros.

Fue un ejercicio de supervivencia osasunista extrema. Los de Arrasate salieron acorralados en Bilbao. Nunca sabremos si los incidentes tuvieron que ver, pero el Athletic aprovechó la primera parte para arrinconar a Osasuna, que no salía apenas de su campo. Iñaki Williams encontró la recompensa del gol a la salida de un córner, pasada la media hora de juego.

El Athletic no se contentaba con empatar la eliminatoria: Sergio Herrera tuvo que salvar a los suyos en multitud de ocasiones. El portero sostuvo a Osasuna en todo momento y llevó a su equipo a la prórroga. Entre el portero y los fallos de Nico Williams, los rojiblancos se fueron ofuscando conforme avanzaba el partido.

Cuando todo apuntaba a la tanda de penaltis, apareció el héroe inesperado. Pablo Ibáñez, canterano de Osasuna y nacido en Pamplona, hizo el gol de su vida en el minuto 116 con una volea impresionante desde fuera del área. La locura se apoderó de Osasuna y cundió la desesperación en el Athletic. El equipo vasco vuelve a fracasar en su enésimo intento por volver a conquistar una Copa del Rey, algo que no hace desde 1984.

Osasuna se mete 18 años después en una final. Además, la clasificación tiene doble premio: los rojillos jugarán por primera vez la final a cuatro de la Supercopa de España en Arabia. Sin duda, este Osasuna ya entra en la historia del club, y el gol de Ibáñez en el olimpo del osasunismo.

Temas

0
comentarios