El Barcelona se llevó de manera épica la final de la Copa del Rey con un tanto en el minuto 116 en la prórroga tras un fallo en salida de balón entre Modric y Brahim que aprovechó Koundé. El Madrid, que había remontando en una segunda espectacular el gol de Pedri en la primera con los goles de Mbappé y Tchouaméni, pero un error grosero en una mala salida de Courtois en un balón largo de Lamine a la espalda de Rüdiger, dio el empate al Barcelona en el minuto 82 e hizo que el partido se decidiera en la prórroga. El encuentro se encaminaba a la tanda de penaltis, pero una mala salida de balón del Real Madrid, con un pase de Modric para Brahim, provocó el robo del lateral culé, que se sacó un potente disparo desde la frontal ante el que nada pudo hacer Courtois.

Rüdiger perdió los nervios tras pitar De Burgos una falta en ataque de Mbappé sobre Eric García por un supuesto manotazo en la cara del ex del Girona. La rabia hizo acto de presencia en un equipo al que le costó, como es lógico, asimilar la derrota.

El feo gesto de Gavi

Tras el pitido final, Gavi salió corriendo hacia Asencio y festejó el triunfo en su cara, un feísimo gesto que como es lógico indignó al central canario que no dudo en recriminárselo al andaluz. Endrick, que estaba cerca y vio lo que ocurrió, se acercó a su compañero para llevárselo.

Al final, la cosa no fue a más y se quedó en ese mal gesto. Gavi continuó con el festejo por la conquista de la Copa del Rey en otras partes del campo junto con sus compañeros del equipo azulgrana.