L D (EFE) Tras firmar tablas en la primera de ellas, Krámnik se anotó la victoria con blancas en la segunda, cedió ante el empuje del búlgaro en la tercera y consiguió la victoria en la cuarta, tras 45 movimientos. Krámnik y Topalov tuvieron que jugar estas cuatro partidas rápidas tras acabar empatados a seis puntos el torneo propiamente dicho.
El ajedrecista búlgaro partía como el claro favorito a la victoria, ya que Krámnik ha tenido problemas con el reloj durante las doce partidas anteriores de las que constó el torneo. Este campeonato se vio salpicado por la polémica después de que Topalov acusar a Krámnik de hacer trampas durante sus frecuentes visitas al baño, tras lo que el ruso no compareció a la quinta partida.
Esta semana Krámnik amenazó con no reconocer a Topalov como campeón y llevar a los tribunales a la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) si el búlgaro se proclamaba campeón gracias al punto obtenido en esa partida. Ambos ajedrecistas se reparten a partes iguales el millón de dólares en premios que otorga el torneo, el primer campeonato unificado desde el cisma que protagonizó en 1993 el también ruso Gari Kaspárov.
El ajedrecista búlgaro partía como el claro favorito a la victoria, ya que Krámnik ha tenido problemas con el reloj durante las doce partidas anteriores de las que constó el torneo. Este campeonato se vio salpicado por la polémica después de que Topalov acusar a Krámnik de hacer trampas durante sus frecuentes visitas al baño, tras lo que el ruso no compareció a la quinta partida.
Esta semana Krámnik amenazó con no reconocer a Topalov como campeón y llevar a los tribunales a la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) si el búlgaro se proclamaba campeón gracias al punto obtenido en esa partida. Ambos ajedrecistas se reparten a partes iguales el millón de dólares en premios que otorga el torneo, el primer campeonato unificado desde el cisma que protagonizó en 1993 el también ruso Gari Kaspárov.