Los árbitros ponen el grito en el cielo de las múltiples críticas que reciben, pero hay veces que es muy complicado de explicar ciertos errores. Este fin de semana se vivió un momento surrealista con uno de los penaltis más vergonzosos de los últimos tiempos. En el encuentro de Tercera RFEF que media al equipo local, el Estradense, equipo de la provincia de Pontevedra, y el Fabril, filial del Deportivo de la Coruña, se señaló una pena máxima que está dando la vuelta al mundo.
El caso es que dos jugadores del cuadro coruñés se dirigieron en el área a por el pase de un compañero con tan mala suerte -o eso pensaron ellos- que se tropezaron. Ya lamentaban su pésima fortuna hasta que el colegiado señaló el punto de los once metros. ¡Penalti! Un choque entre dos compañeros en área rival nunca salió tan productivo.
🔎 Unha das imaxes da Terceira @futgal
𝗣𝗲𝗻𝗮𝗹𝘁𝗶 𝗲𝗻𝘁𝗿𝗲 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗮ñ𝗲𝗶𝗿𝗼𝘀
👓 Gañaba o @EstradenseCd por 2-0 diante do @RCDeportivo Fabril cando aconteceu esta xogada
O resumo do 2-2 en G24 ▶️ https://t.co/jKqizGWoJs
E os goles da xornada no @EnXogo_tvG2 (22:30) pic.twitter.com/1vKrE5sirR
— En Xogo tvG2 (@EnXogo_tvG2) October 2, 2022
El árbitro del partido, Luis Lois Carro, no dudó en señalar la pena máxima. Estaba a un solo metro de distancia de donde sucedió el choque de los futbolistas del Fabril. Los jugadores, el cuerpo técnico y los aficionados del cuadro local estallaron. Rodearon al colegiado. No sirvió de nada. La decisión estaba tomada. El Estradense, que ganaba 2-0, vio como finalmente el Fabril empataba, volaban dos puntos de su estadio, se sentía totalmente estafado y se quedaba sin liderato.