Marián Mouriño dio este jueves su primera rueda de prensa como presidenta del Real Club Celta de Vigo. La hija del anterior presidente, Carlos Mouriño, deja claro que quiere aprovechar todo lo bueno que ha hecho su progenitor en el apartado económico, pero darle una gran vuelta de tuerca al club en lo social y en lo deportivo. Marian espera acercar el equipo a la afición, volver a las raíces y dar un paso adelante en cuanto a crecimiento deportivo se refiere.
Hablando de nombres propios mostró absoluta confianza en Rafa Benítez ("no hay plan B" dijo en relación a cualquier duda sobre su continuidad).
La presidenta del Celta dejó claras cuáles quieren que sean sus líneas maestras y habló de un plan estratégico que se presentará próximamente y marcará el futuro del club. En el aspecto social Marián insistió en la necesidad de "volver a conectar con el celtismo, recuperar a la gente, que sientan que tienen un club cercano. El club tengo claro que pertenece al celtismo y queremos seguir en la línea de recuperar la paz social como se ha visto este verano".
Uno de los puntos negros de Carlos Mouriño fue su constante enfrentamiento con el Concello, personificado en la figura del alcalde Abel Caballero, algo que Marián quiere cambiar, mostrando su intención de "recuperar la cordialidad con todas las instituciones como la Xunta o el Concello. Me encantaría recuperar la foto de Los Escudos en el que todas las instituciones se junten para apoyar al Celta".
Sobre la figura de Luis Campos, asesor externo del conjunto olívico, Marian mostró confianza en su trabajo, aunque deja claro que pretende un modelo deportivo donde el responsable tenga mucho más peso en el día a día:
"Estoy satisfecha con su trabajo, nos ha hecho una plantilla competitiva para conseguir los resultados que se espera. Estamos reorganizando y él está involucrado en esa reorganización", comentó en rueda de prensa.
En este sentido, confesó que le gustaría tener una dirección deportiva "fuerte" y un director deportivo que estuviese en Vigo para que trabajara tanto con el primer equipo como con la cantera, ya que ahora Campos no vive en la ciudad ni viaja con el Celta como hace con el PSG.
"Me gustaría estar más acompañada", admitió Marián Mouriño, quien, no obstante, tiene claro que serán "los números" los que evaluarán la etapa de Campos en Balaídos.
"A mí me convence la plantilla que tenemos y la plantilla que se ha configurado. De momento estoy tranquila porque creo que se ha hecho una buena gestión, pero esto es fútbol; son los números y los resultados los que dirán si se ha hecho una buena temporada o no", subrayó.
La cantera
Otra de las claves en la nueva etapa en la presidencia del Celta seguirá siendo la cantera. Uno de los nombres que más lucen en Vigo es el del técnico del Celta Fortuna Claudio Giraldez, a quien Marián puso por las nubes.
"Lo veo como el estandarte de cantera. Empezó en el equipo cadete, pasó por el juvenil y lleva dos temporadas en el Celta Fortuna. Esperemos que sea un entrenador que esté aquí muchos años con nosotros", sentenció.