Curiosa historia la del triatleta alemán Jaroslav Bobrowski, que está dando la vuelta al mundo. Este deportista, de 30 años y que compite en Ironman, ha sido vetado por un restaurante de Landshut, una localidad de Baviera (Alemania) situada a unos 70 kilómetros al noreste de Múnich, por comer demasiado.
El caso es que Bobrowski acudió un día al buffet libre Running Sushi, aprovechando una oferta de 15,90 euros, y decidió ponerse las botas. De hecho, según medios locales, el deportista ingirió más de 100 platos, con dos o tres piezas de sushi en cada uno de ellos. Más de 4.000 calorías. Una auténtica barbaridad...
"Ha comido por cinco personas, no es normal. No dejaremos que esta persona vuelva a entrar al restaurante. Nunca había visto a nadie comer más de 13 platos y él se tomó cien. Además, sólo se tomó un vaso de té en toda la comida", decía indignado el dueño del local.
Lo cierto es Bobrowski se está sometiendo a una dieta en la que tiene que estar 20 horas sin ingerir alimentos para luego comer hasta saciarse. "Cuando fui a pagar el camarero no quiso aceptar mi propina. A partir de ahora me han dicho que tengo prohibida la entrada, no lo entiendo", explicaba el triatleta.