L D (EFE) "Tenemos que ser respetuosos para saber contra quién jugamos, para preparar el partido, para saber qué condicionantes técnicos y tácticos hay pero, lo importante es que nosotros estemos en nuestra línea", afirmaba Hernández una hora escasa después de que Alemania lograse el pase a cuartos tras superar a Italia (67-58). El técnico indica que el equipo alemán ha tenido "gran dependencia de Dirk Nowitzki en otros campeonatos y, cuando mejora, es cuando todos han tomado su papel, cuando reconocen quién es Nowitzki, cómo sacar partido de él, y cuando reconocen las defensas que se hacen sobre él y responden. Entonces hace el equipo mucho más peligroso".
"Este partido es de competición pura, no un amistoso como los dos que hemos jugado antes del campeonato. Las diferencias están marcadas. En la preparación contra Alemania así se dijo. Los partidos de competición suelen tener otras características. No sé si se parecerán a éste. Dependerá de cómo lo afrontemos y de nuestras opciones defensivas y ofensivas", agrega.
El seleccionador afirma que España "va a tener intensidad en cada momento y, aunque hay características distintas, no es probable sea tan sencillo mantener las ventajas que el equipo consiguió en la preparación". "Los alemanes son buenos defensores. Hay una agresividad importante. No pierden espacios en la cancha y sus bases defienden a los nuestros en toda la cancha. Tendremos que tener en cuenta estas opciones. Tenemos recursos para sobreponernos a ese tipo de defensa. También hay jugadores con una altura considerable que pueden cargar las zonas", explica el madrileño. "En cuanto al ataque, hay una referencia clarísima: los balones que pasan por Nowitzki. Una excesiva atención a este jugador puede dar un exceso de oportunidades a otros jugadores que son buenos lanzadores", continuaba.
Pepu Hernández recuerda que "hay jugadores que son decisivos en los momentos clave. Nowitzki es uno y nosotros tenemos unos cuantos. Es tan importante para su equipo que merece la pena intentar que no ataque bien y que, además, sufra en defensa". "Juan Carlos Navarro está bien. Contra Israel no jugó simplemente por precaución. Espero que pueda jugar sin contratiempos. Es posible que, en un momento determinado, parezca que no está en ritmo. Pero eso me preocupa menos. Lo del ritmo lo lleva en la sangre. Lo que quiero es que esté bien y no tenga dolores", señala el técnico.
Y repite lo poco que le gusta a España el papel de favorita al oro: "Lo dicen los demás -que la selección es favorita-. Nosotros seguimos en la línea de intentar demostrarlo, de no creernos nada, de ser un equipo humilde y con modestia y, sobre todo, con la idea de que nos gusta hacer, no tener que hacer. Las obligaciones son pesos excesivos a veces que hasta te pueden impedir disfrutar de los buenos momentos del baloncesto y de los buenos momentos que te puede dar la propia competición".
"Este partido es de competición pura, no un amistoso como los dos que hemos jugado antes del campeonato. Las diferencias están marcadas. En la preparación contra Alemania así se dijo. Los partidos de competición suelen tener otras características. No sé si se parecerán a éste. Dependerá de cómo lo afrontemos y de nuestras opciones defensivas y ofensivas", agrega.
El seleccionador afirma que España "va a tener intensidad en cada momento y, aunque hay características distintas, no es probable sea tan sencillo mantener las ventajas que el equipo consiguió en la preparación". "Los alemanes son buenos defensores. Hay una agresividad importante. No pierden espacios en la cancha y sus bases defienden a los nuestros en toda la cancha. Tendremos que tener en cuenta estas opciones. Tenemos recursos para sobreponernos a ese tipo de defensa. También hay jugadores con una altura considerable que pueden cargar las zonas", explica el madrileño. "En cuanto al ataque, hay una referencia clarísima: los balones que pasan por Nowitzki. Una excesiva atención a este jugador puede dar un exceso de oportunidades a otros jugadores que son buenos lanzadores", continuaba.
Pepu Hernández recuerda que "hay jugadores que son decisivos en los momentos clave. Nowitzki es uno y nosotros tenemos unos cuantos. Es tan importante para su equipo que merece la pena intentar que no ataque bien y que, además, sufra en defensa". "Juan Carlos Navarro está bien. Contra Israel no jugó simplemente por precaución. Espero que pueda jugar sin contratiempos. Es posible que, en un momento determinado, parezca que no está en ritmo. Pero eso me preocupa menos. Lo del ritmo lo lleva en la sangre. Lo que quiero es que esté bien y no tenga dolores", señala el técnico.
Y repite lo poco que le gusta a España el papel de favorita al oro: "Lo dicen los demás -que la selección es favorita-. Nosotros seguimos en la línea de intentar demostrarlo, de no creernos nada, de ser un equipo humilde y con modestia y, sobre todo, con la idea de que nos gusta hacer, no tener que hacer. Las obligaciones son pesos excesivos a veces que hasta te pueden impedir disfrutar de los buenos momentos del baloncesto y de los buenos momentos que te puede dar la propia competición".