LD (EFE) El fuerte dinamismo de la actividad crediticia –principalmente el crédito con garantía real, que aumentó un 24,5 por ciento–, unido a una mejora de la eficiencia, permitieron a las entidades de depósito españolas mantener en los primeros seis meses de 2005 elevados niveles de rentabilidad.
El Banco de España considera que el dinamismo del negocio exige que la gestión del riesgo del crédito por parte de las entidades sea cada vez más rigurosa, ya que el prolongado crecimiento económico y la baja morosidad en la economía española podría llevar a una "relajación excesiva" de la política de concesión de créditos.
Además de la buena coyuntura económica en España, la institución que dirige Jaime Caruana señala la evolución favorable de las principales economías latinoamericanas como artífice de que los resultados puedan mantener "la línea de solidez mostrada en anteriores informes semestrales".
El margen de intermediación de las entidades de depósito creció en términos absolutos un 10,7 por ciento, hasta los 18.460 millones de euros, con respecto al ejercicio anterior, a causa de la fuerte competencia en el sector y por el reducido nivel de los tipos de interés. Los ingresos netos por comisiones se mantuvieron en niveles similares al anterior informe, reduciéndose hasta alcanzar el 0,76 por ciento del activo total, 8.272 millones de euros. Las comisiones por valores y comercialización de productos no bancarios fueron las que incrementaron su importancia relativa de forma más acusada, pasando del 40 por ciento al 46 por ciento.