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El PSOE de Jerez: de arruinar al consistorio a alentar la huelga

La huelga de basuras que ha puesto en peligro la salubridad pública de Jerez tiene su origen en la nefasta gestión del PSOE.

"El PSOE permitió una subida brutal de los salarios de Urbaser de hasta más de 8 puntos por encima del IPC en plena crisis" afirmó la coordinadora del PP, Lidia Menacho. Esto es, no sólo no resolvió los problemas de la empresa prestadora del servicio, Urbaser, sino que terminó por hundirla. Se ha llegado al extremo de que un trabajador de la limpieza de Jerez cobraba un 34 por ciento más que un trabajador de la limpieza de Madrid.

Hasta tal punto llegó el desbarajuste económico que, esta y otros desastres de gestión, obligaron al Ayuntamiento de Jerez gobernado por el PSOE a firmar un convenio con la Diputación de Cádiz, que incluía un acuerdo de refinanciación de la deuda contraída con concesionarias, por el que el Ayuntamiento debía abonar una cantidad superior a 540 millones de euros hasta 2031, una deuda gravísima para todos los jerezanos.

"Esta hipoteca bestial que nos dejó el PSOE –ha dicho- ha sido solucionada por el Gobierno del PP con la anulación –consensuada por ambas partes- del convenio y el pago de buena parte de la deuda a través de los préstamos ICO. Asimismo, se ha renegociado el contrato con la empresa con una reducción del 20% del coste, al igual que se ha hecho con otras concesionarias, con el compromiso de mejora de la calidad del servicio", dijo Lidia Menacho.

La ruina legada por el PSOE

"El PSOE permitió una subida brutal de los salarios de Urbaser de hasta más de 8 puntos por encima del IPC en plena crisis" afirmó la coordinadora del PP, Lidia Menacho. Esto es, no sólo no resolvió los problemas de la empresa prestadora del servicio, Urbaser, sino que terminó por hundirla. Se ha llegado al extremo de que un trabajador de la limpieza de Jerez cobraba un 34 por ciento más que un trabajador de la limpieza de Madrid.

Hasta tal punto llegó el desbarajuste económico que, esta y otros desastres de gestión, obligaron al Ayuntamiento de Jerez gobernado por el PSOE a firmar un convenio con la Diputación de Cádiz, que incluía un acuerdo de refinanciación de la deuda contraída con concesionarias, por el que el Ayuntamiento debía abonar una cantidad superior a 540 millones de euros hasta 2031, una deuda gravísima para todos los jerezanos.

"Esta hipoteca bestial que nos dejó el PSOE –ha dicho- ha sido solucionada por el Gobierno del PP con la anulación –consensuada por ambas partes- del convenio y el pago de buena parte de la deuda a través de los préstamos ICO. Asimismo, se ha renegociado el contrato con la empresa con una reducción del 20% del coste, al igual que se ha hecho con otras concesionarias, con el compromiso de mejora de la calidad del servicio", dijo Lidia Menacho.

La ruina legada por el PSOE

La deuda de Jerez está cifrada en casi 1.000 millones de euros, 958,7 millones. La alcaldesa García Pelayo fue elegida en las pasadas elecciones municipales con el fin de sacar a Jerez de este hoyo financiero, pero, además, se encontró con un déficit de 31 millones de euros en 2011 y reconducir una gestión económica marcada por el despilfarro del dinero público. Cuando ganó las elecciones de 2011 con mayoría absoluta se encontró, además de esta deuda, con un déficit en 2010 de 31 millones de euros y un déficit acumulado de 429, una deuda con la Seguridad Social y Hacienda de 120 millones y con que el PSOE había hipotecado 540 millones de la recaudación de la Diputación de Cádiz hasta 2031.

Todos los ingresos de 2011 estaban comprometidos en un 80 por ciento y toda la participación en los ingresos del Estado estaba retenida. En la caja solo había 10.000 euros al llegar el PP al gobierno de la ciudad. No podía pagar la Seguridad Social, ni las deudas bancarias ni lo que debían a los proveedores.

Sueldos municipales imposibles

Ahora, los mismos que condujeron a la ciudad al agujero negro de su tesorería, hacen huelgas y concentraciones contra el PP. Pero 2.000 euros era, de media, lo que se cobraba por ser barrendero en el turno de noche en Jerez. Si se era barrendero en el turno de día, 1.900. Un 343 por ciento más que un barrendero de Madrid y todo con la firma del PSOE. Casi sesenta mil anuales por trabajar como auxiliar administrativo en el ayuntamiento o 35.766 por ser portero. Un premio de 160 euros por casarse o pluses trimestrales de 270 por ir a trabajar. Lo cuenta hoy ABC.

Pero no es todo. Un auxiliar administrativo ha llegado a cobrar como máximo 56.206 euros, un vigilante 34.506 y un portero 35.766. Había directores de área con sueldos de hasta 92.772 euros y subdirectores con 86.553. Ahora, los sueldos no pueden superar los 70.000 euros brutos.

Había premio "por asistencia" al trabajo: se pagaba trimestralmente y en 2011 era de 270 euros. Y se daba dinero por empaste -24,41 euros-, por gafas -66,57-, por gafas bifocales o lentillas -94,30- y se abonaba hasta el 40 por ciento de la factura del audífono. El calzado ortopédico se subvencionaba con 51,04 euros, el premio nupcial era de 160 euros, y el de natalidad de 135.

Naturalmente, estas cifras sugieren por qué métodos y de qué modo y manera se ha ido hundiendo el dinero público jerezano. Tras la gestión esencial del andalucista Pedro Pacheco -1979-2003- y la socialista Pilar Sánchez (2005-2011)–, Jerez es el segundo Consistorio más endeudado de España y su cuasi quiebra ha hecho que la alcaldesa del PP, María José García-Pelayo, haya solicitado aplicar un ERE para prescindir de 260 trabajadores, de una plantilla de 1.900, muchos de ellos colocados a dedo por PA y PSOE, con ayuda sindical.

La deuda de Jerez está cifrada en casi 1.000 millones de euros, 958,7 millones. La alcaldesa García Pelayo fue elegida en las pasadas elecciones municipales con el fin de sacar a Jerez de este hoyo financiero, pero, además, se encontró con un déficit de 31 millones de euros en 2011 y reconducir una gestión económica marcada por el despilfarro del dinero público. Cuando ganó las elecciones de 2011 con mayoría absoluta se encontró, además de esta deuda, con un déficit en 2010 de 31 millones de euros y un déficit acumulado de 429, una deuda con la Seguridad Social y Hacienda de 120 millones y con que el PSOE había hipotecado 540 millones de la recaudación de la Diputación de Cádiz hasta 2031.

Todos los ingresos de 2011 estaban comprometidos en un 80 por ciento y toda la participación en los ingresos del Estado estaba retenida. En la caja solo había 10.000 euros al llegar el PP al gobierno de la ciudad. No podía pagar la Seguridad Social, ni las deudas bancarias ni lo que debían a los proveedores.

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