El ministro de Defensa, Pedro Morenés, concedió recientemente una entrevista al diario ABC, en donde confiesa preocupado el riesgo que significa que España reduzca en exceso su presupuesto para las fuerzas armadas. " España corre el riesgo de tener una Defensa ineficiente si se dan tres parámetros: primero, falta de financiación; segundo, falta de dotación; y tercero, falta de adiestramiento" señaló Morenés. Y es que en seis años el presupuesto de defensa ha descendido en casi un tercio, de los 8.494 millones de euros a los 5.746 previstos en los próximos presupuestos.
El ministro reconoce que la notable bajada del presupuesto destinado para Defensa que ha traído consigo "que se empiecen a rozar niveles de adiestramiento que hay que preservar como sea. Porque unas Fuerzas Armadas con hombres y material, y no adiestradas, son ineficientes".
Y es que hay que recordar que a pesar de que las unidades de élite como La Legión o Operaciones Especiales tienen un reconocido prestigio en el exterior, las Fuerzas Armadas en su conjunto han descendido, según el ministro, en formación y adiestramiento a causa de la crisis. Además en la entrevista, el ministro anunció un próximo plan de estructuración para ampliar el número de personal de los 79.000 a los 120.000 efectivos.
Aún así, Pedro Morenés se enorgullece de la lealtad y profesionalidad de nuestros militares que "con mucho o con poco los militares siempre hacen lo que pueden". En cuanto al desafío soberanista promovido desde la Generalidad de Cataluña, el ministro hace especial hincapié en la importante misión de las Fuerzas Armadas que tienen el deber de "mantener la serenidad por encima de cualquier avatar". Y es que, a pesar de las continuas provocaciones por parte de políticos independentistas, los militares con una fuerte coherencia y profesionalidad hacen oídos sordos, demostrando su sólida convicción democrática como guardianes de la Constitución.
Por último, el ministro de Defensa recordó la larga y noble historia de España, "que lleva dese tiempo inmemorial siendo una unidad política". Además, en el contexto actual, en un mundo tan competitivo, "una disgregación conduciría a las partes a su ruina".