Las fuerzas de seguridad consideran a Arantza Zulueta la máxima responsable de la estructura de la banda terrorista ETA para controlar a los presos de la banda y por ello fue detenida el pasado día 8 dentro de la polémica operación Jaque.
Pero unos días antes se habían captado unas impresionantes conversaciones telefónicas en las que la propia Zulueta mostraba su fanatismo y su obediencia ciega a la banda. Así, tal y como desvela en El Mundo de este domingo Casimiro García-Abadillo, Zulueta llega a afirmar: "Estoy aquí porque ETA me ha dicho que esté. El día que ETA me diga que coja una pistola y mate, lo haré".
Siempre según la información de El Mundo, que cita a fuentes de la lucha antiterrorista, la detenida lleva años siendo un puntal importante en la estructura de la banda terrorista que controla a los presos. De hecho, es la responsable de que los encarcelados sigan bajo la obediencia directa de la banda y no en manos de Bildu.
Zulueta se encarga también de redactar los comunicados del colectivo de presos, que ella misma pasa de cárcel en cárcel para que sean firmados por los presidiarios. Cada etarra condenado no sabe si el resto de sus compañeros ha firmado o no el contenido, lo que les impulsa a firmar cualquier cosa.
Por si esto no fuera suficiente, la propia Zulueta ha llegado a amenazar a familiares de presos, a los que dice que pueden quedarse sin abogados, que no tendrán dinero para viajar a las cárceles o que serán repudiados en sus pueblos.
ETA no se disuelve
Uno de los datos más significativos que aporta la información de El Mundo es que la propia Zulueta está entregando a los presos que salen de la cárcel –decenas desde el cese en la aplicación de la doctrina Parot- una carta en la que, a cambio de no dejar la militancia en la banda, se les ofrece dinero e incluso el paso a la clandestinidad.
Es decir, que en lugar de estar planteando su disolución la banda terrorista está intentando mantener activos sus comandos y una base de militantes lo más amplia posible.
Zulueta, según las víctimas, fiscales...
Arantza Zulueta también es protagonista en el diario ABC. Agentes de la Guardia Civil, fiscales de la Audiencia Nacional o víctimas de la organización terrorista cuentan las sensaciones o anécdotas que han vivido cuando les ha tocado coincidir con la abogada de etarras ya sea en juzgados o en centros penitenciarios.
Daniel Portero, presidente de Dignidad y Justicia e hijo del fiscal jefe de Andalucía Luis Portero, asesinado por ETA en octubre de 2000, recuerda cómo en el juicio al etarra Juan Antonio Olarra, inductor del crimen de su padre, la abogada Zulueta le comentó al resto de abogados proetarras presentes en el juicio que "a estos hay que darles matarile".
Agentes del Servicio de Información de la Guardia Civil dicen que "han visto hundirse en los interrogatorios a Parot o al mismísimo Txeroki; perder los nervios a Gadafi o a Txapote", pero que nunca a Zulueta, quien siempre tiene una actitud "crecida y poco colaboradora". "En los interrogatorios -aclaran agentes del Cuerpo-, clava la mirada, como si quisiera grabar nuestros rostros en su memoria y pasar luego fotocopia a la organización terrorista", añade.
Sobre la abogada de etarras también habla un funcionario de prisiones, quien dice que "en la cárcel ha puesto firme al mismísimo Txikierdi y nadie se ha enfrentado a ella cara a cara"; o el abogado de la AVT Pedro Cerracín, quien recuerda que Zulueta entregó en 1991 a un preso de ETA en Sevilla-1 un mensaje en euskera un día antes de que una bomba estallara en la sección de paquetería de esa prisión. Murieron un funcionario, un visitante y dos internos, ninguno de ETA, que ya estaban avisados.
Un fiscal de la Audiencia Nacional que mantiene el anonimato dice que «siempre he estado convencido de que tenía información de primera mano, que siempre ha sabido cómo estaba la banda en cada momento» y dice que un compañero suyo le llegó a preguntar un viernes, medio en broma medio en serio, si ese fin de semana podría salir tranquilo a la calle o tenía que llevar escolta.