España se prepara para despedir al primer presidente de la democracia. Como publica el diario ABC, los restos de Adolfo Suárez descansarán en el claustro de la Catedral de Ávila, donde serán trasladados también los de su esposa, Amparo Illana, fallecida en 2001 y que reposan provisionalmente en la Iglesia de Mosén Rubí, Ávila.
El expresidente Suárez, católico practicante, recibirá por deseo expreso de la familia un funeral cristiano. El guión protocolario marcado por este acto fúnebre está a cargo de Presidencia del Gobierno. Hasta la fecha, como se hace eco El Mundo, sólo existen dos precedentes del uso de este protocolo institucional: el expresidente y mano derecha de Suárez, Leopolodo Calvo Sotelo, y Gabriel Cisneros, uno de los padres de la Constitución. El Gobierno mediante un real decreto declarará tres días de luto oficial, ondeando a media asta la enseña nacional en todos los edificios del Estado y buques de la Armada.
Por su parte, el presidente del Congreso, Jesús Posada, será el encargado de continuar con el protocolo en el Salón de los Pasos Perdidos del Congreso, donde se llevará a cabo la capilla ardiente para que todo aquel que lo desee puedan acudir y despedirse de un líder clave de la historia reciente española.
El féretro del expresidente, cubierto con la bandera de España, será recibido por las altas autoridades del Estado en el Congreso y accederá bajo honores militares fúnebres por la Puerta de los Leones, únicamente reservado para ocasiones solemnes. Fuentes de alto protocolo revelan al diario de Unidad Editorial que no se descarta que hasta el propio Rey esté presente a la llegada del féretro -y no acuda una vez iniciada la capilla ardiente- como señal de respeto y admiración. Asimismo, los restos de Adolfo Suárez serán custodiados en todo momento por soldados de los tres Ejércitos de España y la Guardia Civil.
Tras el cierre de la capilla el féretro saldrá del Congreso de los Diputados con honores militares y bajo el Himno Nacional. Una vez ahí, cabe la posibilidad de que se realice un homenaje en la Plaza Neptuno, tal y como se hizo con Calvo-Sotelo, con salvas de honor y desfile de tropas. La salida de la capital de los restos mortales de Adolfo Suárez se realizará a partir de un cortejo fúnebre seguido por familia y autoridades y cuyo recorrido deberá definirse. Todo apunta a que el recorrido se hará por carretera debido a la proximidad de la tierra natal de Suárez. Por último, se oficializará un funeral de Estado, probablemente, en la Catedral de la Almudena en donde se reunirán la Familia Real, las altas autoridades del Estado, la familia Suárez, representantes de la sociedad y aquellos ciudadanos que quieran acudir.