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Fernández "persuadirá" a la decena de críticos que podrían romper la disciplina de voto

Fuentes de la dirección creen que el PSC "no romperá". Sánchez, mientras, llama a "reconstruir" un "PSOE autónomo". 

Fuentes de la dirección creen que el PSC "no romperá". Sánchez, mientras, llama a "reconstruir" un "PSOE autónomo". 
Pancarta de un militante en Ferraz | EFE

Es la duda que ahora se abre en el PSOE. Cuántos y quiénes romperán la disciplina de voto del grupo socialista enfrentándose a la sanción máxima que aplicará la dirección tras la decisión más dramática que ha tenido que adoptar el PSOE en las últimas décadas: la abstención en la investidura de Rajoy. La gestora daba por descontada la ruptura de una decena de sus 85 diputados: los siete del PSC y otros tres críticos pedristas que ya lo habían manifestado previamente: Odón Elorza, Margarita Robles y Susana Sumelzo.

Pero el resultado de la votación y la delicada posición interna de los socialistas catalanes les hacen ser optimistas a la hora de "persuadir" a su partido hermano en Cataluña y a su recién reelegido primer secretario, Miquel Iceta. Así lo manifestó el presidente de la gestora, Javier Fernández, en rueda de prensa tras el Comité Federal: "Intentaré persuadirles", dijo Fernández tras confiar en que "el PSC asumirá el resultado". En este sentido, pidió "no anticipar resultados" y se negó a concretar si, de llegar la ruptura, se aplicará o no la sanción máxima si no acatan una decisión "imperativa para todo el grupo".

Fuentes de la dirección del PSOE andaluz se manifestaron en la misma dirección asegurando que "el PSC no va a romper. No pueden someterse a una ruptura con el PSOE en este momento". Una situación "complicada" para el PSC que, recordaron, "continúa su proceso interno, su congreso termina el 4 de noviembre y eso es muy complicado para ellos". Por ello, confiaron en que "acabarán siendo responsables". Precisamente, el PSC ha convocado el próximo martes un Consejo Nacional extraordinario para abordar la decisión del Comité Federal del PSOE .

Una decena de posibles rupturas

En esta clave se produjeron también las palabras de Miquel Iceta al término de la reunión. Tras sus reiteradas amenazas, el primer secretario del PSC suavizó el tono y pidió "inteligencia y sensibilidad", pero no con la decisión sino con la situación del PSC. "El Comité Federal del PSOE ha tomado una decisión y los socialistas catalanes se reunirán el próximo martes para tomar la suya. Yo lo que pido a todo el mundo es que seamos inteligentes, sensibles y que comprendamos la posición política del socialismo en Cataluña y que favorezcamos el seguir caminando juntos".

La diputada del PSOE por Zaragoza, Susana Sumelzo, anunció a través de su cuenta de Twitter que, pese a la decisión del Comité Federal, ella mantendrá el 'no' a Mariano Rajoy: "Hoy es un día muy triste para el @PSOE. Seré coherente con mis principios y con los votantes. Adquirí un compromiso y lo cumpliré. No al PP", sentenció en la red social.

Pedro Sánchez se lanza a Twitter

En claro desmarque de la decisión del Comité Federal, el ya ex secretario general socialista, Pedro Sánchez, se apresuraba a manifestar su opinión en Twitter para aventurar cuál es su objetivo en el futuro: "Pronto llegará el momento en que la militancia recupere y reconstruya su PSOE. Un PSOE autónomo, alejado del PP, donde la base decida. Fuerza".

Más amagos...

Las dudas se centran ahora en otros miembros de federaciones menores pero cuya beligerancia es conocida, como la balear. Al término del Comité Federal, la presidenta y baronesa de Baleares, Francina Armengol, se limitó a decir que "seremos coherentes" al ser preguntada si sus dos diputados en las Cortes podrían romper con la disciplina de voto, pero no concretó si esa coherencia se traducirá en un voto negativo a Mariano Rajoy. Lo que sí dejó claro es que considera "una vergüenza que el PSOE posibilite un Gobierno del PP" contraviniendo sus principios y sin dar la palabra a la militancia.

Por su parte, la mano derecha de Pedro Sánchez, César Luena, era uno de los más "apesadumbrados" del sector crítico socialista. A su salida del Comité Federal aseguró que "el PSOE sale fracturado, no roto. Porque el PSOE nunca se rompe. Pero sí hay una fractura clara. Por eso, le pido a la comisión gestora, que es un órgano provisional, que no ahonde en esa fractura y que el traslado de esta decisión a la posición de grupo parlamentario se haga con inteligencia". No quiso responder a qué se refería con esta "inteligencia".

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