Podemos no quiere que, tras el desafío lanzado esta semana por Iñigo Errejón, sus barones tomen ejemplo y se planteen coger un camino diferente al marcado por la cúpula morada. Durante todo el sábado, Pablo Echenique e Irene Montero han reunido en la sede de la formación en la calle Princesa de Madrid a sus secretarios generales autonómicos en un encuentro en el que han tratado de cerrar filas y superar la grave crisis que se ha desatado esta semana.
Podemos saltó por los aires el pasado jueves cuando Íñigo Errejón anunció que renunciaba a las siglas del partido para presentarse a las próximas elecciones autonómicas del 26 de mayo con la plataforma de Manuela Carmena, Más Madrid.
Tras horas analizando la situación en el encuentro de este sábado, "hemos hecho un diagnóstico de la situación y hay unanimidad en que no se entiende el movimiento de Iñigo Errejón y que no le viene bien a ningún territorio porque la necesidad y la voluntad es construir Podemos y que vaya fuerte a las elecciones", aseguran fuentes de la dirección morada.
"Ha sido una reunión muy productiva en la que se han planteado las necesidades de campaña para cada territorio", dicen estas mismas fuentes.
Errejonista que reniegan de Errejón
Por ahora, esta estrategia ha dado sus frutos dado que algunos de los secretarios generales autonómicos considerados afines al sector errejonista se han mostrado contrarios a la decisión de Errejón de unirse a Carmena.
Por ejemplo, el líder de Podemos en la Región de Murcia, Óscar Urralburu, ha dicho este sábado en un comunicado que "todos nos hemos visto sorprendidos por las formas en la que Íñigo Errejón ha realizado su anuncio, unas formas que no compartimos y que forman parte de una decisión que afecta solo a la comunidad de Madrid, y en ningún caso es extrapolable al resto de territorios del conjunto del país".
También se ha desvinculado de Errejón Juan Pedro Yllanes, juez y candidato de Podemos en las Islas Baleares, que en Vistalegre II formaba parte de la candidatura errejonista.