Con el mismo equilibrismo en el que se viene moviendo el Gobierno en estos ocho meses de mandato, Pedro Sánchez ha viajado este jueves a Estrasburgo en la primera visita de un presidente del Gobierno al Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) y el Consejo de Europa. Un viaje muy simbólico, según fuentes de Moncloa, que explican en privado la importancia de esta visita, a una semana del inicio del juicio del pruses, y para defender "la solidez y confianza en nuestro sistema sin necesidad de hablar de sentencias específicas".
En su discurso ante el Consejo de Europa, Pedro Sánchez defendió, frente a quienes hablan de presos políticos, que España "es una democracia que asume como propios el sistema de separación de poderes, que defiende la independencia judicial y tiene uno de los sistemas más garantistas del mundo que respeta a las minorías".
No hubo referencias expresas a Cataluña ni a su relator con la Generalidad de Cataluña pero sí muchos mensajes velados contra "las fake news" de las que se nutren ‘las derechas’ de PP; Ciudadanos y VOX para convocar una manifestación este domingo en Madrid solicitando la convocatoria de elecciones. "A pesar del poder de los datos siempre habrá quien sostenga sus proyectos políticos en base a relatos falsos para movilizar hacia el odio y hacia la división".
Y respondió también de forma velada a esa petición de elecciones: "Una democracia plena no adquiere tal condición sólo y exclusivamente por la aritmética del voto. La adquiere porque el imperio de la Ley, el respeto a las instituciones y a los derechos humanos no están en cuestión ni tan siquiera por el juego de las minorías o las mayorías coyunturales".
"Es la propia democracia la que está en juego si permitimos que este relato divisivo y sesgado se imponga", defendió Sánchez tras abogar por "invocar un relato de esperanza frente al miedo al futuro".